El ombligo es una cicatriz que recuerda la unión con la madre durante los meses de gestación.
Se trata de una marca que registra el punto de unión al cordón umbilical, pequeño tubo orgánico que se encarga de aporta oxígeno y nutrientes al bebé durante el tiempo que pasa en la barriga de la madre.
Sin embargo, el cordón umbilical deja de ser necesario tras el nacimiento, pues el bebé empieza a respirar por sí solo y se alimenta a través de la boca, y el ombligo no tiene ninguna función durante la vida del ser humano.
El ombligo no es más que eso, una cicatriz en el abdomen que acompaña al ser humano toda la vida.
Tamaño y forma
El tamaño del ombligo varía en función de cómo se realice el corte del cordón umbilical.
El 90% de las personas tienen el ombligo hacia dentro y sólo un 10% lo tienen hacia fuera.
El dolor de ombligo
El dolor de ombligo es más común de lo que creemos.
Y es que son muchas las personas que acuden cada año al médico preguntando por dolencias en el centro de la zona abdominal.
Las causas de estas dolencias son varias, aunque principalmente suceden por alteraciones intestinales (distensión abdominal por gases, infestación por parásitos, enfermedades que causan infección o inflamación abdominal).