La falacia patética o falacia antropomórfica es un recurso literario que consiste en atribuir sentimientos humanos a objetos inanimados de la naturaleza.
Así pues, una falacia patética describe la naturaleza dotándola de sentimientos, pensamientos y sensaciones humanas.
La palabra ‘patética’ no debe entenderse como algo peyorativo, sino como que “conmueve profundamente o causa un gran dolor o tristeza”. Se entiende como empatía.
El término falacia patética fue empleado por primera vez por John Ruskin en ‘Modern Painters’ (1856).
Ruskin escribió que el objetivo de la falacia patética era el de "significar cualquier descripción de objetos naturales inanimados que les atribuya capacidades, sensaciones y emociones humanas".
Ejemplo de falacia patética
Ejemplo de falacia patética que aparece en el primer capítulo de ‘Drácula’, de Bram Stoker.
“A pesar de encontrarnos así protegidos, podíamos escuchar el viento que se levantaba, pues gemía y silbaba a través de las rocas”