El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha intentado durante estos últimos meses unificar a las formaciones herederas de Convergència en un solo partido político aunque no ha tenido éxito.
El PDeCat se ha negado a fusionarse con JxCat y a estar bajo las órdenes de Carles Puigdemont por lo que el expresidente catalán ha tomado la decisión de pasar al 'plan B'. (Hacienda somos todos, también el golpista Carles Puigdemont: ¡¡A pagar!!)
Según La Vanguardia, Puigdemont se ha cansado de esperar a David Bonvehí, jefe de filas del PDeCat, y tiene en mente celebrar la asamblea constituyente de su nuevo proyecto el próximo 25 de julio.
La idea de Puigdemont es que en esta asamblea se escogieran la presidencia, las vicepresidencias y la dirección de la nueva formación. También se hablaría del secretario general y de las secretarías de organización, de finanzas, de comunicación y de estrategia política.
El siguiente paso será la creación de un consejo nacional y la aprobación de un manifiesto fundacional, que estará directamente relacionado con el "mandato del 1-O".
Carles Puigdemont ha acelerado todo esto por la proximidad de las elecciones autonómicas catalanas, que podrían celebrarse el 27 de septiembre o el 4 de octubre de este año. (Puigdemont está de cuerpo presente en la Generalitat: ¿Quién manda aquí?)
El PDeCat da la espalda a Puigdemont
El PDeCat, partido heredero de Convergència Democràtica y liderado por David Bonvehí, ha plantado cara a Puigdemont en estas últimas semanas ya que no están de acuerdo con algunos de sus ideales.
Bonvehí y muchos de los alcaldes, la mayoría de pequeñas ciudades, rechazan que Puigdemont asuma todo el poder del nuevo partido político independentista.
Bonheví, que se opone a la fusión que propone Puigdemont, cuenta con cientos de apoyos dentro de su partido político, según un texto publicado por los dirigentes que confían en él.
Según el citado documento, 130 alcaldes de la formación y 60 candidatos están muy satisfechos con la gestión de Bonheví y su forma de llevar a formación política. Otros, en cambio, si que reclaman una negociación con Puigdemont para fusionarse y hacerse más fuertes.