La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, y la Generalitat de Cataluña, representada en ese momento por el vicepresidente del Govern, Jordi Puigneró, acordaban el pasado mes de agosto el pacto para la ampliación del aeropuerto barcelonés El Prat.
Una inversión de más de 1.700 millones de euros de las arcas públicas españolas que ahora no se realizará, después de que el Ejecutivo nacional y Aena hayan decidido cancelar la ampliación por la falta de apoyo de la Generalitat de Cataluña al proyecto.
Explicaciones dadas desde Transportes que han indignado a los principales partidos independentistas, JxCat y ERC, cuyos máximos representantes, Puigneró y Aragonès, ya han criticado que el Estado español haya vuelto a "traicionar" sus pactos, mientras que los de Junts señalan a ERC como el principal responsable de la confusión generada sobre la conveniencia de la ampliación del aeropuerto.
Puigdemont responde desde Waterloo
Escena de nueva ruptura entre los socios del Govern, y de un nuevo auge del independentismo frente al Gobierno de España, que ha sido utilizada por Carles Puigdemont para recuperar la voz cantante en Cataluña.
"Una y otra decisión confirman cuál es el problema real" ha asegurado el fugado de Waterloo en su cuenta de Twitter: "la dependencia de un Estado, y que las decisiones que nos afectan no dependen de nosotros" ha lamentado.
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Palabras con las que el ex president no sólo criticaba la cancelación de la ampliación pactada entre el Ejecutivo nacional y su partido, sino también la decisión del "cambio de nombre del aeropuerto, decidido de manera unilateral, que tampoco tenía el apoyo del Govern".