Bildu sigue empeñada en rescatar todo lo que pueda de la desaparecida ETA para llenar sus filas de terroristas y personajes condenados por la justicia de varios países. El último, David Pla, ex dirigente de la banda, que integrará el equipo de Sortu.
Impune
David Pla fue uno de los personajes más importantes en los últimos días de ETA hace más de 10 años. Él mismo ha reconocido que fue uno de los cobardes encapuchados que leyó el comunicado del fin de la violencia por parte de ETA en 2011. Pero antes de eso, ya había acumulado un largo historial delictivo.
Buscado tanto en Francia como en España, Pla fue condenado por la justicia francesa por asociación delictiva en 2015. Salió de la cárcel cuatro años después y fue entregado a España, pero en esta ocasión, las autoridades judiciales decidieron dejarle en libertad alegando que “ya no tenía causas pendientes”.
El criminal confeso no pasó ni un solo día en la cárcel en España a pesar de haber sido uno de los cabecillas de la organización más letal y sanguinaria de la historia del país. Ahora, libre de cargos y responsabilidades, podrá llegar a vivir del sueldo de todos los españoles al entrar a formar parte de la ejecutiva de Bildu.
Aupado
Bildu celebró este sábado su asamblea de clausura de su III Congreso en el Frontón Bizkaia, donde han elegido a la nueva dirección del partido. Sortu, formación integrada en en partido, recibió el apoyo masivo de los afiliados (89%). Pla fue elegido como responsable del Marco de Orientación Estratégica y vicesecretario general tercero, dentro de un equipo formado por cinco mujeres y cinco hombres para dirigir el partido desde la Secretaria Nacional.
Su elección ha generado disputas internas dentro del propio Sortu. Hay algunos que piensan que Pla unirá más sus filas al ser un personaje reconocible y respetado dentro de la izquierda ‘abertzale’. Pero hay otro, más sensatos, que creen que su nombramiento volverá a desatar las críticas sobre ellos, tal y como está ocurriendo en las últimas horas. Y como debe ser.