Pedro Sánchez prometió regenerar RTVE, que sigue siendo una Corporación pública al servicio del Gobierno de turno, y Pablo Iglesias teorizó durante años sobre los beneficios de una televisión estatal independiente.
Pero socialistas y morados han llegado al poder y las entrevistas se las llevan las privadas: Iglesias ha sido entrevistado por Wyoming y Vicente Vallés, ambas estrellas de Atresmedia, e Irene Montero se estrenó como ministra con Ferreras.
Tampoco se queda atrás PRISA, que dio en exclusiva la noticia de la semana: la SER adelantó que Dolores Delgado se convertía en la nueva fiscal general del Estado para bochorno de todo el mundo judicial.
Asalto a PRISA
El PSOE dice que no le gustan los fondos buitre... pero sin embargo está encantado con Amber Capital, compañía liderada por uno de los mayores amigos mediáticos de Pedro Sánchez: Joseph Oughourlian.
Este tiburón está preparando una OPA sobre PRISA para alegría de Sánchez, que odia a los que aspiraron a controlar la SER y El País.
Es el caso de Carlos Slim, amigo de Felipe González, o César Alierta, que contribuyó a echarlo de la secretaria general del PSOE en 2016.