'Gran Hermano VIP 7' llega a su fin, y se nota.
Los concursantes de la séptima edición están que se suben por las paredes, y matan el tiempo dentro de la casa jugando a cosas... peligrosas.
Así pues, como si las cámaras de la casa no existiesen, los inquilinos de Guadalix se animaron a jugar al mítico 'Yo nunca', juego que consiste en confesar los mayores y cuestionables actos que has llevado a cabo a lo largo de tu vida.
Esto, acompañado de bebidas espirituosas, que provocaron que el juego acabara convirtiéndose en un desmadre, cosa que desde la producción del programa ya esperaban.
A Mila Ximénez le va el mortero
La colaboradora de 'Sálvame' no tardó en dar la nota en el juego.
"Yo nunca le he dado al mortero" preguntaba Alba Carrillo. Es decir, dejaba sobre la mesa la pregunta de quién había probado el sexo anal.
Y Mila, ni corta ni perezosa, no tardó en coger el vaso y beber. "Además, está muy bien" - afirmó la de Sálvame.
Una declaración que dejó en shock a sus compañeras de partida, Estela Grande, Adara Molinero, Noemí Salazar y Alba Carrillo.
Adara puso la guinda al pastel
La ex de Hugo, en un arranque de valor gracias al alcohol, no tardó en igualar a Mila Ximénez con el tono de sus confesiones.
Así pues, ante la pregunta de en qué lugares extraños habían tenido relaciones sexuales, Adara confesó que "en un tanatorio, con el amigo del fallecido".
Una confesión brutal que dejó con la boca abierta a concursantes y espectadores. Alba Carrillo, sin parar de reír, no pudo evitar bromear sobre ello: "pésame, pésame mucho".