En una situación de peligro inminente, ya sea real o subjetivo, la inmensa mayoría de los hombres sienten cómo el aparato genital se retrae.
Concretamente, los testículos, el escroto (la bolsa que contiene los testículos) y el pene se encogen.
Un mecanismo de protección
Según los biólogos, este hecho obedece a un mecanismo de protección heredado de nuestros ancestros.
Así pues, se trata de una respuesta del sistema nervioso vegetativo frente al peligro.
El músculo cremáster
La sensación en encogimiento genital se produce con la contracción del músculo cremáster, que tira de los testículos y de la piel del escroto hacia arriba.
¿Lo sabías?