Los presos independentistas del 1 de octubre disfrutaban, este pasado fin de semana, del comienzo de su tercer grado penitenciario, que se les otorgaba el pasado viernes 29 de enero.
Una 'libertad' de la que pronto podrían disfrutar plenamente, ya que actualmente, la vía de los indultos a los líderes del 1-O continúa su trámite en el Tribunal Supremo, habiendo solicitado el juez Marchena, esta pasada semana, los informes pertinentes a la Abogacía del Estado.
Unos informes que se juntarán con los ya presentados, a finales del mes de diciembre,por la Fiscalía, y que mostraban el rechazo de la institución a otorgar la medida de gracia a los doce sentenciados por los hechos de octubre de 2017.
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Un rechazo que, presumiblemente y según infoma el diario El Mundo, podría ser compartido por el Alto Tribunal, siguiendo el talante demostrado ante la otorgación del tercer grado penitenciario a Oriol Junqueras y el resto de condenados y encarcelados por la causa secesionista.
Sin embargo, el posicionamiento del Tribunal Supremo, así como el de la Fiscalía, no tendrán carácter vinculante, teniendo el Ejecutivo de Pedro Sánchez el poder definitivo sobre los indultos, a pesar de que éste se oponga a los deseos expresados por el tribunal sentenciador.
Indulto parcial y levantamiento de la inhabilitación
A medida que los indultos siguen su vía judicial, van saliendo a la luz cada vez más detalles sobre las posiciones de las instituciones a este respecto, habiéndose dejado entrever que la Moncloa estaría estudiando un "indulto parcial" a los presos del 1-O.
En concreto, y según el citado diario, se estaria hablando del caso de Oriol Junqueras, quien actualmente cumple la condena más larga por el procés independentista, de 13 años de prisión e inhabilitación por un delito de sedición y malversación.
Así pues, el líder de los republicanos podría no cumplir los más de nueve años que aún le quedan de condena; una decisión que se podría extender a las condenas de Carme Forcadell, Dolors Bassa, Jordi Turull, Josep Rull, Raül Romeva, Joaquim Forn, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart.
Del mismo modo, el Ejecutivo de Pedro Sánchez podría estar planteando la posibilidad de introducir, en la 'letra pequeña' de este indulto, el levantamiento de la inhabilitación al líder independentista, que impide a Junqueras ejercer cargos públicos hasta 2031, haciendo que el retorno del de ERC a la política, más allá de los mítines a los que asiste estos días, se convirtiese en una victoria de los secesionistas sobre la Justicia y el Gobierno de España.