La ganadora de Gran Hermano Vip 7 ha contado en las redes cómo está llevando el confinamiento en su casa.
La joven que defiende el concurso de su madre en Supervivientes ha aprovechado para relatar cómo está siendo para ella el estar encerrada en casa y lo cierto es que parece que no lo lleva nada mal.
Adara aislada
Hace unos días Adara nos hizo partícipes de la mala relación que existe actualmente con su padre. Jesús se ha puesto del lado de Hugo y ella no lo lleva nada bien.
Después de la orden del Gobierno, la exazafata se lo ha tomado a rajatabla y se encuentra confinada en su casa con su pequeño y con su chico Gianmarco.
Lejos de venirse abajo, Adara ha sacado el lado positivo a toda esta situación y no ha dudado en contárselo a todos sus seguidores. Actualmente está viviendo en un piso que según ha contado no tienen ni siquiera televisión pero eso es lo que menos le preocupa en estos momentos.
La pareja está volviendo a vivir su propio Gran Hermano y eso les está ayudando a conocerse todavía mucho más, tanto para bien como para mal. Como toda pareja siempre tendrán momentos mejores y momentos peores aunque entre ellos el amor siempre vence.
Adara también ha querido contar que la relación con su hermano va mejorando poco a poco. "Recibí un mensaje muy bonito en el que decía que me quería. Poco a poco vamos a intentar recuperar la relación que teníamos antes".
Cuenta cómo lo lleva
Si algo sabe y conoce muy bien Adara es de aislamiento después de haber vivido durante más de 100 días encerrada en la casa de Gran Hermano. (GH VIP y Supervivientes dejan 'huérfana' a Adara Molinero)
"Esto no es el fin del mundo… Hay que sacar la parte buena, podemos estar con la gente que queremos, podemos tener largas conversaciones, momentos íntimos maravillosos, aprovechar el tiempo…", empieza contando.
Señala que está feliz con el aislamiento ya que por fin tiene tiempo para ella, su hijo y su chico. "Yo estoy encantada de poder estar con Gianmarco porque antes no teníamos tanto tiempo y lo estamos aprovechando mucho".
Confiesa que entre ellos han surgido las primeras diferencias y discrepancias aunque ambos intentan amoldarse el uno al otro como buenamente pueden. "Esto conlleva que tenemos mucha más intimidad, nos vamos conociendo cada vez más. Tenemos que ir encajando poco a poco. Al conocernos hay cosas muy muy bonitas y otras en las que somos diferentes: primero tiene que ir cediendo uno y luego otro. Ahora somos nosotros 100%". Y añade que "cuando dejemos de estar aislados queremos hacer un montón de cosas, pasear, comer fuera, viajar… tengo tantas ganas de viajar con él que lo necesito ya! Lo bueno se hace esperar".
Por lo que a su relación con Hugo se refiere también ha contado qué espera de su regreso de Supervivientes. "No sé que va a pasar. Lógicamente tendré que estar más tiempo en Mallorca. Nos veremos cuando podamos hasta que todo se solucione". (Ivana y Hugo se montan un festival de sexo en la playa)
Y concluye asegurando que para ella "el coronavirus es una luna de miel" ya que puede disfrutar todo el tiempo de Gianmarco.