La importancia de algunos jugadores en el inicio de temporada del Real Madrid no ha pasado inadvertida para muchos equipos grandes de Europa. Uno de ellos es el Liverpool, que parece empeñado en boicotear y robarle todos los fichajes que plantea Florentino Pérez. No contentos con eso, los máximos responsables del club de Merseyside quieren que un jugador blanco traicione al presidente y se marche a jugar a Anfield.
El objetivo del equipo 'red' es Fede Valverde. El centrocampista uruguayo ha despertado a los ojos de Europa, especialmente después de sus brillantes actuaciones en la pasada campaña europea y el brutal arranque de temporada 22/23 en el que está probando ser diferencial para los intereses de Carlo Ancelotti y Florentino Pérez.
Por eso, Klopp ha insistido en la importancia de fichar al charrúa de cara a las próximas temporadas. El entrenador germano ha tenido que sufrir al centrocampista uruguayo en más de una ocasión, y está como loco por seguir la misma política de fichajes: incorporar a todo aquel futbolista que haga un muy buen partido contra el club de Merseyside. El Liverpool busca hacerse con los servicios de Fede Valverde, pero la situación no es tan fácil. Él tiene ganas de seguir haciendo historia y triunfando en el Real Madrid, algo que los ingleses no pueden ofrecer todas las temporadas.
Además, el factor personal podría jugar un papel clave en esta saga. Mina Bonino, una de las WAG más carismáticas y conocidas de la plantilla blanca, ha demostrado estar totalmente en línea con el sentimiento madridista, por lo que la marcha de la familia Valverde-Bonino a Inglaterra podría ser imperdonable para la mujer del todocampista uruguayo.
La cuestión económica es una de las principales amenazas en las hostilidades del club inglés. Durante la temporada pasada, los 'red' intentaron llevar a Valverde a Anfield ofreciendo 90 millones de euros. Desde entonces, la oferta solo ha ido subiendo. Este mismo mercado de verano, el conjunto blanco registró una oferta de hasta 100 millones de euros por el traspaso de Fede Valverde.
Ahora, Klopp y los directivos del Liverpool han ido demasiado lejos. Ofrecen 150 millones de euros en concepto de tránsfer por Fede Valverde, además de un contrato al que muy pocos podrían decirle que no: si se marcha al lado 'red' de Merseyside, el centrocampista uruguayo cobraría 11 millones de euros netos al año, el doble de lo que cobra con su contrato actual en el Real Madrid.
Por el momento, todas estas ofertas están siendo rechazadas de manera sistemática por el Real Madrid y por el entorno del jugador. Fede Valverde tiene claro que su futuro próximo pasa por el Real Madrid, y está cerrado a un traspaso a cualquier equipo. Sin embargo, las negociaciones por la renovación podrían pasar factura a la relación entre presidente y jugador. Ese sería el momento ideal para el Liverpool, que podría imponer sus condiciones.
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La condición de intransferible de Valverde remite a su cláusula de rescisión: 1000 millones de euros. Esta elevada cifra es un auténtico seguro frente a hostilidades como las del Liverpool, que espera que la moral del jugador o del club se resquebrajen y acepten negociar un traspaso para lograr sus propósitos. Sin embargo, los 'red' no tienen nada que hacer por el momento.