Ni reclamar un referéndum ni apalear al Rey: El nuevo Parlament empieza con cagarrinas

Ni reclamar un referéndum ni apalear al Rey: El nuevo Parlament empieza con cagarrinas
Ni reclamar un referéndum ni apalear al Rey: El nuevo Parlament empieza con cagarrinas

Algo tan habitual en el Parlament catalán como reclamar un referéndum o cuestionar la monarquía desde todos los puntos de vista pasará a mejor vida. Jaume-Alonso Cuevillas, secretario y abogado de Puigdemont, es ahora secretario de la Mesa del Parlament y ha dicho que no sirve para nada y sólo puede llevar a la cárcel a quienes admitan a trámite cualquier propuesta de ese tipo.

Les han entrado las cagarrinas. La experiencia es un grado, dice el refrán, y la experiencia les ha enseñado a algunos que jugar a ser héroes sólo puede conducirles a la cárcel. Cuevillas, que ha sido diputado en Madrid y conoce muy bien la ley, no está dispuesto a entrar en chirona como tantos otros por reclamar el referéndum o pedir la abolición de la monarquía, dos cuestiones tan absurdas que hasta ellos mismos lo empiezan a entender.

"Resoluciones que no llevan a ningún lugar"

Y ha sido el propio secretario segundo del Parlament y diputado de Junts, Jaume-Alonso Cuevillas, el que ha planteado que la Cámara catalana no admita a trámite propuestas de resolución contra la monarquía y a favor de la autodeterminación porque no llevan "a ningún lugar".

Lo ha dicho en una entrevista concedida a VilaWeb: "No sé si tiene sentido que te inhabiliten por haber tramitado una resolución que no lleva a ningún lugar".

Cuevillas, uno de los hombres de confianza de Puigdemont, ha añadido que "no podremos mantener nada, porque duraremos un soplo y al día siguiente el Tribunal Constitucional (TC) lo anulará, y no tendrá ningún recorrido. La inmolación debe hacerse si tiene alguna eficacia", ha dicho. 

La eficacia de todas las fechorías que ha cometido el Procés hasta ahora ha sido nula. Y sólo ha servido para que unos huyan en estampida al extranjero escondiéndose de la justicia y otros tengan que pagar por sus pecados en la mazmorra.

Cuevillas no quiere ir de cabeza al matadero

Y Cuevillas, que tonto no es, no quiere seguir el mismo camino directo al matadero y trata de imponer el sentido común en un Parlament que hace mucho tiempo que ha perdido el norte.

Para Cuevillas admitir a trámite propuestas de resolución relativas a la monarquía o a la independencia no es confrontación inteligente porque esas iniciativas son declarativas, por lo que es "mucho más eficaz hacer un acto" para denunciar la situación.

"¿Qué es más eficaz para desgastar al Estado español? -se ha preguntado- ¿Denunciar esto o dejar que nos inhabiliten sin pena ni gloria por una tontería?". A este al menos se le ve espabilado. Al matadero que vayan otros.