El centrocampista croata Luka Modric sigue demostrando a sus 36 años que está en un excelente estado de forma. A pesar de su veteranía y su edad, el croata parece haber descubierto el secreto de la juventud eterna.
Es increíble el nivel al que sigue compitiendo, como si fuera un chaval de 23 o 24 años. Ya quisieran muchos jóvenes estar en la forma física del madridista. La clave del espectacular rendimiento de Modric la tiene Vlatko Vucetic, el kinesiólogo y entrenador personal del ‘10’ blanco.
“La clave del éxito es que mantenemos a Luka en forma constante, que siempre está entre el 85 y el 100%, lo que se puede ver en el hecho de que puede soportar no solo 90, sino 120 minutos de intensidad. Esta forma le permite ser uno de los jugadores con menos lesiones”, explicaba el preparador.
“Antes de cada entrenamiento y partido, hace media hora con una banda elástica. Sus músculos se vuelven más elásticos, como si tuviera resortes por todo el cuerpo. Y, por supuesto, haz siempre una recuperación después del partido", detallaba Vucetic.
El preparador físico del ex del Tottenham también hablaba de lo que suele hacer después de los grandes partidos, como el del PSG, Chelsea o Manchester City, encuentros de gran trascendencia y muy exigentes a nivel físico y mental. Modric se suele beber dos cervezas por una curiosa razón.
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