Luka Modric fue el encargado de hablar ante los medios, antes del Inter-Real Madrid de Champions League, y, obviamente, fue preguntado por su posible renovación. El croata, con pies de plomo, aseguró querer renovar, pero lo hizo en tono muy frío.
“Me siento fuerte y todavía tengo bastante fútbol en mis piernas y fuerza para seguir, pero ya veremos qué va a pasar en el futuro. Se pregunta mucho por mi situación, pero ya lo veremos. Yo estoy tranquilo. Quiero ayudar al equipo y ya veremos qué pasa en el futuro”, matizó Modric dejando claro que todavía no ha renovado su contrato.
Al decir eso, en la misma rueda de prensa, le comentaron que su respuesta parecía fría y tibia. Modric se defendió con el mismo argumento y dejó claro que no dependía de él su futurible renovación y que sigue a la espera de entablar negociaciones.
“No era fría. He dicho muchas veces que me siento muy bien en el Madrid y que me gustaría acabar mi carrera aquí, pero vamos a ver qué pasa. A ti te parecía fría porque muchas veces me preguntan y siempre digo lo mismo. Yo me siento bien y quiero seguir aquí mientras pueda ayudar al equipo. No sé qué va a pasar. Quiero seguir en el Madrid, sí, pero depende de muchas cosas. Nadie estará más contento que yo si me quedo aquí”, argumentó en su alegato.
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Modric lo ve complicado
El croata no tiene ninguna exigencia, como bien han contado medios como Defensa Central, y está dispuesto a seguir en el Real Madrid. El único ‘pero’ pasa por sus minutos. Él quiere sentirse importante y cree tener todavía mucho fútbol por ofrecer. Es una gran clave que decidirá si sigue o si, por el contrario, se va del Real Madrid en 2021.
Ya dio pistas al asegurar que se siente mejor sin dosificarse y en el terreno de juego, pero la edad pesa para todos y en el caso de Modric, al igual que de Sergio Ramos, tampoco está exento de ese evidente cambio generacional.
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