Casi tres meses después de ser diagnosticada con un cáncer de pulmón con metástasis, Mila Ximénez volverá este miércoles a la clínica La Luz, en Madrid, para someterse a una prueba de control sobre su enfermedad.
"Sigo con el tratamiento y todo va bien. El miércoles me hago una prueba, pero todo va bien. Estoy convencida de que esto es un escalón más" aseguraba el 29 de agosto en el plató de Sábado Deluxe.
Un positivismo que ha mantenido desde que el 16 de junio confesara públicamente que padece un cáncer de pulmón inoperable, ya que no se encontraba focalizado, y se había extendido en forma de metástasis.
"A mí un tumor no me va a parar la vida" aseguraba la colaboradora, que volvía este 1 de septiembre a su trabajo en el plató de Sálvame, y que pasará su prueba médica definitiva este miércoles, que podría ser la que dictaminase su regreso absoluto, o no, a la televisión.
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Así será la 'prueba de fuego' de Mila Ximénez
A pesar de que Mila Ximénez no ha dado más datos sobre en qué consiste la prueba que le harán durante este miércoles, este diario ha podido saber que se tratará, según fuentes, de un control rutinario del avance del cáncer, y del efecto del tratamiento.
La inmunoterapia y quimioterapia, tratamientos que no eliminan el cáncer, pero sí lo "duermen", evitando su expansión, tienen un proceso rutinario dentro de la vida del paciente, que se somete a revisiones cada tres meses (coincidiendo las fechas en el caso de Mila) y, una vez 'controlada' la enfermedad, cada seis meses, según datos de la American Cancer Society.
Así pues, la colaboradora podría someterse a una radiografía de tórax, para plasmar en película la imagen de las células cancerígenas; también a una citología de esputo, es decir, la obtención de una muestra del moco de los pulmones, que posteriormente sería analizada por el laboratorio; y, por último, una ecografía de la zona.
La prueba que determinará su paso por televisión
Los resultados de esta visita a la clínica que lleva su tratamiento podrían determinar, para bien o para mal, el destino profesional y personal de Mila Ximénez.
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Y es que, a pesar de su esperado regreso a televisión, la colaboradora es muy consciente de su delicado estado de salud, habiéndose ya enfrentado a un tumor en el útero de ocho centímetros en 2015, que resultó ser benigno.
Amigos, compañeros, audiencia, fans ... todos desean la pronta y definitiva recuperación de la polémica colaboradora; pero, de ser los resultados distintos a los deseos de todos, podrían provocar una última y terrible decisión de la colaboradora: abandonar, temporal o definitivamente, la televisión, dedicándose exclusivamente a su lucha contra el cáncer, que todos esperamos que tenga una clara vencedora.