Los científicos del Instituto de Ciencias Marinas de Andalucía (ICMAN-CSIC) y el Instituto Geográfico Nacional (IGN), pertenecientes al CSIC, han grabado el delta formado por el volcán de Cumbre Vieja (La Palma) durante los primeros días de octubre.
Utilizando drones, los investigadores han conseguido acercarse hasta el volcán Cumbre Vieja y han filmado imágenes escalofriantes de la lava saliendo del volcán, recorriendo las laderas y llegando hasta el mar, donde ya ha formado un delta de varias hectáreas.
En la zona del delta se puede ver una capa sólida de color negro y humeante mientras que al fondo se aprecian ríos de lava que siguen avanzando hacia la costa. Esos metros que ha ganado La Palma al mar pasarán a ser propiedad del Estado.
A medida que los drones se van acercando al volcán se ve una mayor cantidad de lava, que se mueve a mayor velocidad y que ocupa mucho más terreno. La superficie de toda la zona es de color negro y la cantidad de humo se incrementa cuanto más próximo está el aparato del Cumbre Vieja.
A pocos metros del volcán de La Palma se puede observar su virulencia y las explosiones, que retumban en toda la isla, desde que el Cumbre Vieja entró en erupción hace algo más de dos semanas. La zona está completamente devastada por el magma y la lava.
Este fenómeno natural que mantiene en vilo a todos los habitantes de La Palma y del resto de España, ha destruido más de 1.000 edificaciones. Muchos vecinos de la zona se han quedado sin sus viviendas y lo han perdido todo a raíz de la erupción del volcán.
El volcán se estabiliza
En las últimas horas, la actividad del volcán de Cumbre Vieja se ha mantenido estable, con "comportamientos constantes" y la lava discurriendo por una única colada de forma fluida. De acuerdo con el último informe del Departamento de Seguridad Nacional (DSN), "aunque el número de seísmos y su magnitud han disminuido en las últimas horas, aún se producen movimientos sentidos por la población y que podrían originar pequeños derrumbes de la colada en zonas de pendiente".
El mismo informe señala que se ha formado un tubo lávico que permite la salida directa de lava del volcán Cumbre Vieja al mar, "lo que consigue que el ancho de la colada no aumente y por tanto no afecte a más construcciones". Eso sí, los expertos siguen alerta ya que esto no significa que vaya a cesar la lava y las explosiones.