Mercedes Milá se convirtió en una presentadora de éxito en Gran Hermano y todo dio un giro de 180º cuando en 2016 se despidió de la audiencia del programa pasándole el testigo a Jorge Javier Vázquez.
Los fans del programa no entendían el porqué de su marcha y es que nadie capitaneaba las galas como lo hacía ella que según señaló había sido "el programa de su vida".
La enfermedad de Mercedes
Haciendo gala de su naturalidad a Mercedes no le importó ponerle nombre a lo que le ocurría y dar a conocer su enfermedad.
"Tuve un desgaste de mi cerebro, un desgaste de estrés, un desgaste muy profundo, que me hizo saber lo que es la hiel de la depresión", señaló.
Nunca ha tirado la toalla y no pierde la esperanza de curarse y acabar con esta enfermedad. "Lo que le quiero decirle a la gente es que hay solución. Con química, psiquiatría -porque yo voy a una psiquiatra- y no tengo pudor en decir que esta persona me está ayudando".
Ha sido a través de Instagram donde la periodista se ha vuelto a pronunciar al respecto y ha querido explicar a sus seguidores cómo se encuentra. "Estoy mejor, los que estáis en tratamiento sabéis las ganas que tenemos de quitarnos las pastillas los que hemos estado mal (…) Estoy descubriendo el yoga, teatro en inglés… También he probado el swing. Mi profesor Gastón es maravilloso. La verdad es que me sentí muy cómoda y avanzamos bastante. Podía parecer hasta que sabía. Ahora estamos preparando un baile un poco más largo con pasos más complicados…".
Junto a estas palabras, Mercedes aparece haciendo ejercicio y bailando junto a su perro Scott y su profesor de swing donde además le acompañan bonitos mensajes de ánimo y admiración por parte de sus seguidores.