El dorsal de Mbappé, para los más 'frikis' (por catalogarlo de alguna forma), es uno de los temas que más preocupa. Actualmente, sus dos números que lleva tanto en el PSG como en Francia, están cogidos. El '7' lo tiene Eden Hazard y el '10' lo tiene Luka Modric.
Dos dorsales, por tanto, que no habría podido lucir si hubiese llegado esta temporada. Mbappé lleva su '7' y Hazard, con el que incluso llegó a bromear en la Nations League, no pensaba en un cambio de número en el 2021-2022. Su situación, eso sí, ha cambiado radicalmente.
Hazard llegó al Santiago Bernabéu con el rol de ser un TOP-4, a nivel mundial, tras haberse confirmado en el Chelsea como uno de los mejores jugadores del mundo. Eden casi llegó a llenar el coliseo madridista, en su presentación, aunque no pudo igualar el registro de Cristiano Ronaldo. Se quedó en el de Kaká.
Como si eso fuese un símil de lo que estaba por llegar... Hazard hizo un gran inicio de temporada, tal y como pasó con el brasileño, pero quedó marcado por las lesiones. Cuando estaba en el modo de velocidad de crucero, en su mejor momento de forma, Eden veía como Meunier le lesionaba y lo dejaba en el dique seco. Meses de angustia, hasta la actualidad, para dejar claro que esa jugada le había cambiado la carrera.
A Hazard se le dio un rol de indiscutible e incluso fue Mariano Díaz, que llevaba el '7', el que le entregó el número y dejó claro que era la nueva estrella del equipo blanco. Esa condición, ahora, ha cambiado de forma radical. Su lesión le cambió para siempre y ya no ha vuelto a ser el que era.
Meses en la enfermería, encadenando lesiones, y viendo como el madridismo se empezaba a impacientar con él. Hazard nunca ha vuelto a recuperar su mejor nivel. Y ahora está en una gran encrucijada. El belga se la juega en este final de temporada y su salida ya no es un tema tabú.
Está en venta
El club blanco considera seriamente la venta del belga a final de temporada, pero si no puede ser, aun así pretende darle el '7' a Mbappé. Intentarán convencerle para que se lo ceda, del mismo modo que Mariano hizo con él en su momento. Un paso que deja, a las claras, que ha dado un giro radical.
El vuelco de Hazard se explica por las constantes lesiones y en el Bernabéu, tal y como sucedió con Asensio, no han gustado las palabras, de presión, que lanzaron en el entorno del futbolista. El Real Madrid esperará a que termine la temporada para tomar decisiones en firme.
Hazard se marca un Asensio y su entorno también aprieta al Madrid por su titularidad