Ferland Mendy se ha convertido en una de las grandes preocupaciones del nuevo Real Madrid de Carlo Ancelotti.
El lateral francés no ha podido empezar la pretemporada con todos sus compañeros y se perdió la Eurocopa, de forma íntegra, por su grave lesión sufrida.
El galo trabaja a marchas forzadas para volver al césped, pero en el Real Madrid creen que va para largo. Le dan otros 15 días y eso pone en riesgo, totalmente, su participación en los primeros partidos de la temporada oficial en Liga.
Mendy volvería al trabajo al césped, primero en solitario, e iría cogiendo rodaje con el grupo ya a partir de agosto.
A otro ritmo, completamente distinto, Ancelotti sabe que debe ir con calma con él para evitar nuevas recaídas de su lesión y entrar en el bucle al que se ha visto sometido Hazard en su última etapa de blanco.
El club apenas informa sobre su lesión y se remite a anunciar que está “en el interior de las instalaciones” sin poder tocar todavía balón y sin sentirse futbolista en la pretemporada. Todo trabajo físico para evitar que vuelva a caer a las primeras de cambio.
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El tema de su renovación
A Mendy le crecen los enanos ya que, estando lesionado, se atrevió a subir al despacho de Florentino Pérez para pedir un aumento salarial y una renegociación de sus condiciones en la ficha.
El Real Madrid tiene a Miguel Gutiérrez en la recámara y rindiendo a un alto nivel y no cederá a ningún tipo de chantaje o presión. Saben que Mendy merece más dinero, pero se agarran a la crisis financiera que ha provocado el coronavirus con el cierre del Bernabéu.
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