La periodista Alexia Rivas, pareja de Alfonso Merlos y una de las protagonistas del Merlos Place, quiere ser modelo. O quiso serlo.
Para ello, creó un perfil en la agencia Model Management, en la que se vendía muy bien aportando datos como su peso, estatura, color de ojos, medidas o nacionalidad, además de explicar que es “una periodista que trabaja en televisión”.
“Soy periodista que actualmente trabaja de reportera de televisión. Con ganas de adoptar nuevos proyectos y retos y crecer profesional y personalmente. Muy ambiciosa y trabajadora”, se definía.
Su nueva archienemiga, Marta López, no ha tenido reparos en mandarle un recadito a tenor de dicha descripción: “Si tan trabajadora dice que es, estoy deseando que empiece a trabajar otra vez y que podamos verla”, espetaba la ahora colaboradora de Sálvame.
El rencor de Marta López
La amiga de Kiko Hernández dejaba entrever el rencor que siente hacia la mujer que le ha quitado el novio y que la ha dejado como la cornuda de España.
“A ver, a mí me parece una niña muy mona. Pero tanto como modelo...”, explicaba Marta, que cree que Alexia se ha vendido demasiado bien: “Creo que se ha pasado un poco”.
Para la ex gran hermana, Alexia Rivas no tiene motivos para hacer semejantes comentarios: “Se ha subido un poco, se ha pasado en todo lo que pone ahí. Creo que en la altura también”, apuntó.
Habla el rencor
Parece evidente que Marta López habla desde el rencor hacia una Alexia que se ha convertido en su peor pesadilla desde que apareció supuestamente por un despiste detrás de Merlos en el programa Estado de Alarma.
Marta López se ha dedicado desde entonces a guerrear contra Alexia y sobre todo contra Alfonso. Pero como él no ha entrado al trapo, parece que no quiere que se le acabe el chollo y busca nuevos enemigos.
Ahora solo falta ver si Alexia entra al trapo y continúa la gresca entre las dos. De momento, Marta López ha dejado claro que está muy dolida con la que fuera reportera de Socialité hasta hace nada. (Algún día tenía que pasar: "Es peor que José Antonio Avilés". ¡¡Las mentiras de María Patiño tienen las patas muy cortas y le explotan en la cara!!).