Patético espectáculo el ofrecido por el candidato de ERC a la alcaldía de Barcelona, Ernest Maragall en el debate de candidatos a la alcaldía de Barcelona que emitió TV3. No contento con los impuestos que pagan los ciudadanos para hacer realidad el proyecto separatista, pidió públicamente sin ruborizarse más dinero al pueblo catalán para hacer frente las fechorías de sus políticos.
Suele decir Albert Rivera que "el que la hace la paga". En el caso de los separatistas que se saltaron la ley promoviendo un golpe de estado, el que la hace no la paga. Deben ser los ciudadanos quienes lo hagan por ellos. Maragall confía en que las multas que tienen que pagar los políticos indeoendentistas por saltarse la ley salgan del bolsillo de los ciudadanos en concepto de donativos. Limosna pura y dura. (¡¡¡Duro enfrentamiento entre Maragall y Manuel Valls por ‘la xenófoba y racista’ Nuria de Gispert!!!)
“Hoy se han embargado las cuentas de un buen grupo de servidores públicos de este país y de esta ciudad. Yo pido a los telespectadores, a la mayoría de ellos, que estoy seguro que estarán en condiciones de aportar aún recursos a la caja de solidaridad”, dijo Maragall en el debate.
Y añadió que “es imprescindible para hacer frente a la venganza que desde el Estado se está practicando sobre nuestros servidores públicos, sobre aquellos que contribuyeron al 1 de octubre. Nos jugamos conceptos tan básicos como la dignidad y la libertad”.
El debate de TV3
En el debate de TV3 Ada Colau ha evitado criticar a contrincantes en su minuto final, y ha defendido que Barcelona se ha convertido durante su mandato en un referente de "políticas valientes", por lo que ha pedido que los votantes la apoyen este domingo para que siga siendo la alcaldesa. (No se pierda el vapuleo escandaloso de la BBC a Ernest Maragall. ¡Parece cachondeo!)
"Volved a demostrar que tenemos mucho más poder del que nos han hecho creer", ha proclamado Colau, que ha subrayado --en declaraciones después del debate-- que éste ha sido de nuevo un 'todos contra Colau', algo que acepta porque es la alcaldesa.
La número dos de JxCat, Elsa Artadi, ha pedido votar para que el cabeza de lista de JxCat a las europeas y expresidente del Govern, Carles Puigdemont, pueda ser eurodiputado, y para que su alcaldable en Barcelona, Joaquim Forn, pueda volver al Ayuntamiento: "Estas elecciones van de Barcelona, de Cataluña y de las voces libres de Europa".
El candidato de BCN Canvi-Cs, Manuel Valls, ha pedido frenar "la mentira del separatismo del señor Maragall, que es el gran peligro para la ciudad", de cuyo gobierno hay que echar a Colau, según el exprimer ministro francés, que ha pedido evitar una alianza entre Colau y el alcaldable socialista, Jaume Collboni. (Pilar Rahola se ríe de Manuel Valls llamándole: “¡¡¡Manuelito guapo” y “francés pata negra!!!”)
Maragall ha destacado que Barcelona pide ser gobernada con valentía y solvencia, y ha prometido recuperar el buen gobierno: "No vengo a pactar con Colau, vengo a sustituirla", y ha dicho que quiere gobernar para todos los barceloneses y que es el único candidato republicano, progresista e independentista.
Collboni se ha comprometido a no subordinar la ciudad al debate independentista: "El 28 de abril ganamos a las derechas de PP, Cs y Vox, y el 26 de mayo tenemos que hacer posible un gobierno 'probarcelona', que ponga los problemas de la ciudadanía en primer lugar, y no un gobierno 'proindependencia', que es lo que proponen Maragall y Colau". (El juez no acepta la colecta de la Caja de Solidaridad y embarga los bienes de los procesados del 1-O)
El candidato del PP, Josep Bou, ha asegurado que Colau, Maragall y Artadi son un lastre para el progreso y la convivencia en la ciudad: "En un mundo que se globaliza, el populismo y el independentismo nos separa y nos enfrenta", y ha pedido el voto para avanzar hacia una ciudad libre de separatismo, de populismo y de 'manteros', según él.
Anna Saliente (CUP) quiere cuestionar los privilegios de los grandes propietarios de vivienda y avanzar en el decrecimiento turístico y de la contaminación, para lo que cree que se requieren fuerzas que sepan decir 'no' y también llegar a acuerdos, y ha añadido: "El 1-O es el camino, nos demuestra que sin la fuerza de lagente y sin el compromiso no podremos avanzar en las políticas necesarias".