¿Se imaginan a los cabecillas de la mafia con la oportunidad de jugar la ruleta online, al poker, a las tragaperras, entre otros juegos, vía online mediante Internet?
Quizás la historia fuese muy distinta a la que conocemos, pero llegamos a reflexionar que la misma se escribe con sangre. La humanidad, desde tiempos inmemorables, ha estado sumida en conflictos entre sí, ya sea por política, religión, raza, expansión del territorio de naciones, recursos naturales, entre otras razones. No por nada se dice que, actualmente vivimos una de las épocas más pacificas en la historia de la humanidad, todo gracias al avance tecnológico, comunicacional y al progreso del desarrollo del comercio internacional.
Gracias a estos factores, somos capaces de comunicarnos desde un país a otro en cuestión de un parpadeo. Aunque es algo positivo, la ambición de los países por hacer crecer su economía aún más, hace que el desarrollo del mercado globalizado sea desigual entre países, creando una gran brecha entre ellos, catalogándoles como países desarrollados y en vía de desarrollo. Como dice la famosa frase de la película de Wall Street: “El dinero nunca duerme”, el mundo gira entorno al papel moneda y metales preciosos. Y, en un mundo tan económicamente dividido en clases sociales, cualquier persona haría lo que fuese por tener una vida más cómoda. Este último, es el caso de las famosas mafias alrededor del mundo, las cuales utilizan el medio de las apuestas para sus fines ilícitos. Pero, ¿Qué es la mafia?
Son organizaciones criminales las cuales defienden sus propios intereses económicos escalando más allá de lo establecido por la ley, es decir, el crimen organizado. Sus orígenes se mantienen hasta el día de hoy y datan de Sicilia, Italia. Actualmente se les define como organizaciones clandestinas, siendo una de la más famosa la mafia italiana, que trabajan de forma ilegal para el crecimiento personal económico como, por ejemplo, la mafia del narcotráfico, la mafia de tráfico de animales, entre otras organizaciones. Dos de los principales actos mafiosos más comunes cometidos son, el lavado de dinero, que significa legitimar el dinero ganado con acciones ilícitas, por ejemplo, el comprar un casino y con el dinero generado legalmente de el hacer el blanqueo de capitales del ilícito, de está forma ingresa al sistema financiero sin problema alguno y el dinero no pasa a ser un despilfarro sobre ruedas. También, tenemos el uso de paraísos fiscales con el fin de evitar impuestos.
Desde los primeros días de Las Vegas hasta la era actual en internet, la mafia sigue presente en muchos juegos de azar, varios de sus principales personajes son: Meyer Lanskey, más conocido como “El Contador”. Se estableció en Estados Unidos para el año 1911, considerado un genio de las matemáticas, influyó en el gobierno cubano para que hiciera legal el juego de azar, estableciendo así espectaculares casinos en La Habana. Además de crear la mayor parte del sistema financiero de lavado de dinero para la mafia, a través de sus casinos y juegos de azar. Siendo uno de sus favoritos la ruleta, amasó la fortuna de 300.000 millones de dólares, de los cuales luego de su muerte, no se lograron conseguir. Se dice que quedaron ocultos en paraísos fiscales y bancos en el extranjero.
Durante una entrevista estableció: “No existe algo como un jugador afortunado, sólo hay ganadores y perdedores. Los ganadores son los que controlan el juego… los demás son tontos”. Siendo uno de los exponentes más adecuados para nombrar, ya que refleja la versión de un ser humano ambicioso, el cual con su inteligencia busca hacer dinero a través de las pasiones de los demás, el ocio y dándoles la posibilidad de acercarse al jugoso sueño de “tenerlo todo”. La mafia ha utilizado a los casinos durante años para el lavado de dinero ya que, es un lugar donde las personas van a gastar su dinero sin importar las consecuencias, donde el alcohol, la ansiedad de un futuro mejor y la buena compañía se mezclan para satisfacer el ocio del jugador. Es por ello que un jugador de fútbol gana más que un profesor, aunque sus labores son muy distintas, un profesor tiene mucho más peso y responsabilidad que un jugador de fútbol, pero en un mundo donde se busca un escape, el entretenimiento es mucho más vendido que una buena educación. Utilizando esta manera de razonamiento de las personas, la mafia se apoderó del juego, sacando provecho su lado más oscuro y obsesivo, un círculo vicioso interminable donde todo se resume en ganar o perder dinero, tiempo y en el peor de los casos hasta la vida.