El politólogo Roger Senserrich ha escrito un artículo para Voz Pópuli hablando de los motivos por los que Madrid está creciendo mientras que Barcelona se hunde a pasos agigantados.
"Barcelona era más rica, más próspera, más innovadora. Era la ciudad que crecía más rápido, la que atraía más talento, el lugar donde los mejores intelectuales, escritores y artistas del país buscaban inspiración y refugio. La ciudad era la capital de la industria editorial en castellano de todo el planeta, vibrante, vital, llena de vida", ha dicho Senserrich. (El procés ha hundido la economía catalana: ¡¡Más de 5.400 empresas han huido tras el 1-O!!)
"En algún momento en los últimos 30 años, sin embargo, esta historia dejó de ser cierta. (…) cuando la vida cultural barcelonesa empezó a depender cada vez más de subvenciones, mientras que la madrileña florecía", ha añadido.
"Madrid siguió creciendo en población; Cataluña y Barcelona se estancaron y empezaron a perder peso respecto al resto del país. Madrid empezó a crear empleo más deprisa que Barcelona, atraer a más universitarios, invertir más en I+D", ha comentado.
"El PIB por cápita de Madrid alcanzó y luego superó al barcelonés, y la distancia ha seguido aumentando. Madrid ha sido quien ha cogido el tren del crecimiento, mientras que Barcelona era cada vez más provinciana", ha explicado el politólogo. (La economía catalana, en caída libre por culpa del supremacista Torra)
En esta línea, Senserrich ha señalado que hay un aspecto que no explican. "Lo que no explican, sin embargo, es por qué cuando Madrid tenía todo el poder político centralizado y controlaba el 100% del gasto público durante el franquismo, Barcelona crecía más que Madrid, mientras que ahora, cuando la Generalitat controla más de la mitad del gasto, Madrid crece más que Barcelona". (Un estudio demuestra que el procés ha convertido a Cataluña en un lastre para España)
La excusa de Cataluña
"La excusa del expolio fiscal es igualmente absurda, ya que Madrid tiene un déficit fiscal aún más negativo que Cataluña (…) el tan manido tema de gasto de infraestructuras resulta ser falso, ya que Cataluña es la comunidad qué más inversiones ha recibido desde 1985 (Madrid es la tercera)", ha comentado Senserrich.
El politólogo ha confesado que la prioridad de Cataluña les ha llevado a estar por debajo de Madrid. "La prioridad de la Generalitat fue el fer país (hacer país) y el debate sobre la catalanidad de la vida cultural, asociativa y empresarial centró la vida política barcelonesa. (…) la participación cívica, en vez de la alegre anarquía madrileña, se ha convertido en una política de bloques lingüísticos y culturales. La creciente polarización política ha hecho el resto.
Eso si, Roger Senserrich ha dejado claro que la culpa no es de Madrid. "La balcanización institucional y política catalana han hecho de Barcelona una ciudad cada vez más desconfiada, y por lo tanto, cada vez menos innovadora, menos optimista. La verdad, dudo mucho de que la culpa sea de Madrid".