Sergio Ramos quiere renovar, a la desesperada, su contrato con el Real Madrid. El capitán del club blanco se ha quedado sin ofertas después de varios meses en la enfermería y se encuentra sin equipo para la próxima temporada. Nadie le va a pagar lo que el club blanco está dispuesto a darle. O lo que estaba dispuesto a darle, mejor dicho. Porque ahora hay serias dudas sobre si conviene o no ampliar el contrato del camero.
Luis Enrique tiene gran parte de la responsabilidad de que Sergio Ramos esté en esta situación, ya que el de Camas tenía la esperanza de hacer una buena Eurocopa o al menos demostrar que las lesiones han quedado atrás. Era su baza para obtener alguna oferta con la que poder presionar al Real Madrid. Pero a Florentino ya nada le impresiona.
Ramos se baja los pantalones y filtra su renovación a la desesperada
El presidente del club blanco puso sobre la mesa su oferta y fue claro: o lo tomas o lo dejas. Ahora Sergio quiere rectificar porque, por culpa del seleccionador, está en una situación muy complicada. Puede quedarse sin contrato con el Madrid y sin destino para la 2021-22.
El Real Madrid ha captado el mensaje y se está planteando qué hacer. Pero Florentino Pérez está molesto con el capitán por el comportamiento que ha tenido durante los últimos meses.
Florentino quiere que Sergio Ramos se lo diga en persona
Florentino Pérez no va a aceptar que el tema de la renovación de Sergio se resuelva en los medios de comunicación. Después de todo el circo, solo se replanteará la posibilidad de volver a poner la oferta sobre la mesa en el caso de que Sergio Ramos le diga a la cara y en persona que quiere seguir en el Madrid y que se equivocó.
Rectificar es de sabios, pero el presidente del Real Madrid cree que Sergio no debe esconderse detrás de las filtraciones a sus periodistas afines, tal y como ha hecho los últimos días deslizando informaciones para intentar presionar al club.
La renovación de Sergio Ramos no es imposible, todavía puede haber un entendimiento. Pero la relación entre Sergio y Florentino está más desgastada que nunca después de que el camero haya tensado la cuerda hasta límites insospechados.
Sergio Ramos sabe que no va a estar en ningún sitio como en el Real Madrid. A nivel deportivo no hay color, y a nivel económico la oferta blanca es la mejor que va a tener casi con toda seguridad. Saber que el Madrid está preparando el evento para despedirle por todo lo alto le ha hecho reaccionar. No se quiere ir e intentará encauzar las cosas porque, ahora mismo, está en la calle por 'culpa' de Luis Enrique.