WhatsApp es la principal aplicación de mensajería instantánea. Y, en el caso del ámbito escolar, puede convertirse en una herramienta esencial para comunicarse con el resto de padres durante el transcurso del año académico.
Los típicos grupos de WhatsApp llamados 'alumnos de 4ºA' reúnen en varias ocasiones quejas de profesores, peticiones de deberes, chistes o imágenes de los pequeños.
Pero en estos grupos suelen circular una gran cantidad de mensajes que pueden resultar abrumadores para los padres. Por ello, la plataforma de clases particulares online, GoStudent, ha realizado una encuesta a más de 2.000 padres españoles sobre estos grupos de chat:
- El 47,5% de los padres consideran que estos grupos son bastante informativos.
- El 31% de los encuestados creen que, con tanto mensaje, resultan agobiantes.
- Y, por último, el 15% de los padres califican a estos grupos como un infierno.
Buena praxis de estos grupos
A raíz de estas respuestas y porcentajes, la psicóloga de GoStudent, Carlota Montemayor, ha indicado en una nota de prensa dirigida a los medios de comunicación que lo mejor sería que en estos grupos se establecieran normas claras sobre el uso y abuso del chat, según la información publicada por la página web '20 bits', añadiendo la guía definitiva para sobrevivir a ellos.
Entre las cosas que sí se deben hacer en este tipo de grupos escolares encontramos: hacer resúmenes de las reuniones para aquellos que no hayan podido asistir; comunicar sobre enfermedades, infecciones o virus; responder, a través de un chat privado, a las preguntas que no sean de interés para el resto de padres; preguntar las dudas que puedan surgir de una forma clara y concisa; y, por último, compartir opiniones personales sobre las diversas actividades extraescolares o clases de refuerzo.
En la guía, también podemos encontrar consejos sobre lo que no hay que hacer en los grupos de padres:
Lo que no se debe hacer es: pedir los deberes hechos; compartir ideas políticas o religiosas con el objetivo de crear polémica; criticar a los profesores de los niños, padres o incluso a los propios alumnos; y, finalmente, evitar los mensajes repetitivos.
Abandonar o no abandonar el grupo
Una cosa que hay que tener clara es que pertenecer a uno de estos grupos de WhatsApp es algo voluntario. Por esta razón, no hay que cuestionarse si algún padre decide irse o quedarse en el chat o si participa activamente o no envía nada.
El hecho de no estar en este tipo de grupos no perjudica en nada al alumno, mientras que el padre o madre mantenga abierto un canal de comunicación con el centro educativo.
Además, el propio colegio cuenta con sus propios canales informativos y también cuentan con plataformas educativas en las que se ofrece información general y la específica de cada alumno, según la información del diario 'Deia'.