"El Presidente del Gobierno es Pedro Sánchez. Y eso a veces nadie debería olvidarlo, incluso dentro del Gobierno".
Con estas duras palabras, la ministra de Defensa, Margarita Robles, lanzaba un claro mensaje crítico a Pablo Iglesias, de forma velada, a través de una entrevista ren Televisión Española.
Unas palabras que apoyaban la también discreta crítica de Nadia Calviño en el programa de Carlos Alsina, donde la ministra de Economía aseguraba, sin dar nombres, que existía cierto afán de 'protagonismo' dentro de las filas podemitas, dejando claro que pensaba en el vicepresidente segundo del Gobierno.
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Declaraciones que molestaban dentro de la cúpula podemita, que volvía a utilizar las redes sociales para cargar contra los ministros socialistas, en lo que parece una lucha sin cuartel que, poco a poco, evidencia la clara división entre las dos secciones del Gobierno de coalición.
Una división de la que se habla, tal y como ha podido saber La Razón, en los pasillos ministeriales, donde el hastío de los socialistas con el líder de los morados es más que evidente.
"Puñalada por la espalda" o "deslealtad" son algunas de las frases más recurrentes entre los ministros de Sánchez, dichas con boca pequeña ante posibles filtraciones, hacia las filas podemitas, advirtiendo ya que esta brutal oposición dentro del propio Gobierno podría acabar con Sánchez a corto plazo.
"Esto tiene mal arreglo. La coalición acabará muy mal [...] Sánchez debería dar menos importancia al show y a las apariencias, o le pasará como a Rajoy, que los problemas internos se le pudrirán y se lo llevarán por delante" aseguran desde un Ministerio.
Sánchez 'ignora' el enfrentamiento de sus ministros
A pesar de que los enfrentamientos entre socialistas y podemitas son cada vez más preocupantes, y llenan portadas y titulares dentro de los medios de comunicación, Pedro Sánchez se mantiene en silencio ante la cuestión, dejando que sean los ministros los que defiendan su papel dentro del Gobierno.
Un silencio que también preocupa a los socialistas por sus posibles repercusiones políticas: "el problema es el coste de esta bronca soterrada permanentemente".
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Sin embargo, Pedro Sánchez sigue contando con sus ministros para solventar cualquier asunto, así como defendiendo al Gobierno de coalición... aunque no en Twitter, donde el presidente ha explicado que los PGE son un "desafío" al que los socialistas deben responder.
"España necesita unos nuevos PGE [...] Los socialistas elegimos ser responsables". Una declaración en la que Sánchez evita hablar del Gobierno que dirige, especificando y comprometiéndose únicamente al esfuerzo realizado por las líneas socialistas del Ejecutivo.