Zinedine Zidane es uno de los mejores jugadores de la historia. Su legancia con el balón en los pies era una delicia para todo amante al mundo del fútbol. Además, llegó al Real Madrid en el verano del 2001 con el objetivo de ganar una Copa de Europa y lo consiguió en su primera temporada vestido de blanco. De hecho, en la final dejó un gol que es sin lugar a duda el mejor de todos los tiempos en las finales de Champions. Eterno.
Asimismo, a esa Liga de Campeones hay que sumarle el Mundial que conquistó con Francia en 1998, dejando una exhibición en tal competición. Cabe resaltar, que 'Zizou' es toda una leyenda en su país y también en el Santiago Bernabéu.
La hinchada merengue disfrutó mucho con este mago. Es evidente que dio tardes de grandes espectáculos en La Castellana. Además, el protagonista de esta noticia sabe cual es la grandeza del Rey de Europa, ya que jugando contra los blancos perdió aquella final de Ámsterdam. Por aquel entonces, era jugador de la Juventus y el gol de Mijatovic daba la ansiada Séptima al Real. No solo ha triunfado a nivel colectivo. En el ámbito individual se llevó el Balón de Oro de 1998.
Como ya todos sabrán, del terreno de juego dio el paso a los banquillos. Como entrenador, su legado tampoco se queda atrás y es que es el único técnico que ha conseguido tres Champions seguidas.
A pesar de que su carrera es legendaria, sus primeros años como jugador de fútbol no fueron nada fáciles. Descubre el motivo leyendo esta noticia de Planeta Real Madrid, web hermana de 'Defensa Central'.