Decartados Cristiano Ronaldo y Leo Messi, por razones ovbias, sólo quedan en el mercado dos bombas de verdad por tantear para que lleguen al Real Madrid como la guinda del pastel de los fichajes que ha organizado Florentino Pérez este verano.
Mbappé llegará, pero no ahora
Sólo dos jugadores pueden subir el nivel de la actual plantilla que han formado Zinedine Zidane y Florentino Pérez: Kyllian Mbappé y Neymar. Con el primero Florentino quiere repetir la experiencia de Eden Hazard, al que ya quiso fichar el pasado año y al que ha esperado después de que el propio jugador se encargara de ablandar al Chelsea, que finalmente ha entendido que es un buen negocio vender a Hazard por 150 millones cuando el próximo verano quedaba libre.
De la misma manera que Florentino le dijo a Hazard en una gala de la FIFA que había llegado el momento de que fichara por el Real Madrid, con Mbappé está sucediendo lo mismo. Es un fichaje que se está cocinando a fuego lento, sin prisas, habida cuenta la edad del jugador (20 años). El Real Madrid lo quiere (su afición lo demostró en la presentación de Hazard) y él está más que convencido de dar el paso. Tiene un año por delante para allanarle el camino a Florentino Pérez y presentarse en el Bernabéu con 21 años.
Con Neymar sí hay prisa
Con Mbappé no cuenta Florentino para la próxima temporada. Pero con Neymar sí. El sueño del presidente blanco es juntar en su mismo equipo a una delantera formada por Mbappé, Neymar y Hazard. Sólo de pensarlo da miedo. Ya tiene a uno, Hazard, y ahora va a lanzar toda su artillería para conseguir a Neymar de forma inmediata.
Para nadie es un secreto que Neymar no es feliz en París y que nada le haría disfrutar más que vestirse de blanco después del desprecio que le ha hecho el Barcelona negándose a negociar su retorno al Camp Nou. El Barça es para él una etapa cerrada y ahora mismo sólo aspira a facilitar la negociación que le lleve al Real Madrid.
Poco a poco se van dando las condiciones. Se ha peleado con su propia afición, ha tenido conflictos con sus compañeros, no ha acabado de adaptarse a la vida francesa y, para acabarlo de arreglar, el club ha decidido despedir al director deportivo, Antero Henrique, hombre de confianza de Neymar que fue clave en su fichaje por el PSG. Llega otro brasileño, Leonardo, que ya estuvo en el club como jugdor, entrenador y secretario técnico, pero su conexión con él no es la misma.
El hogar de los galácticos
Neymar se está cargando de razones para forzar su marcha del PSG y Florentino Pérez, a través de Juni Calafat, el hombre de los fichajes brasileños en el Real Madrid, ya ha establecido los primeros contactos en la sombra con el padre de Neymar para hacer posible la operación. El precio que el presidente blanco está dispuesto a pagar tiene los 280 millones de euros como tope. El PSG no quiere vender, no necesita dinero, pero se verá obligado a hacerlo cuando Neymar exponga con claridad y de forma pública su deseo de dejar el PSG para fichar por el Real Madrid. Su lesión, que le ha impedido participar en la Copa América, juega también a favor del Real Madrid para agilizar la negociación.
No será Mbappé, como pedía la afición en la presentación de Hazard, pero otro galáctico de verdad está a punto de aterrizar en el Bernabéu a la espera de que dentro de un año madure lo de Mbappé y el Real Madrid pueda convertirse, de nuevo, en el hogar de los galácticos.