"Bienvenidos a una nueva era" aseguraba el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, poco antes de aprobarse los Presupuestos Generales del Estado para 2021, gracias al apoyo de los nacionalistas vascos y catalanes a la Cuentas del Ejecutivo socialcomunista.
Unas palabras que eran prontamente convertidas en hechos por el Gobierno de Pedro Sánchez, ya que pocas horas eran necesarias para que se hicieran públicas las primeras concesiones del Gobierno de España a los independentistas catalanes y a los proetarras vascos.
Polémica ha sido la decisión del ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, que aprobaba el traslado de otros seis presos etarras al País Vasco, siendo ya más de un centenar los reclusos de ETA que se han trasladado a los alrededores del País Vasco durante el Gobierno de Pedro Sánchez.
Un traslado que, nuevamente, ha sido criticado por la Asociación de Víctimas del Terrorismo, que ha manifestado su indignación: "Vuelven a casa por Navidad" han lamentado.
También los nacionalistas catalanes se han mostrado muy satisfechos con las cesiones de Sánchez, que no solo contemplan la amnistía para los líderes independentistas presos, sino también el control sobre las pensiones, y la armonización fiscal a nivel nacional.
"En Cataluña se nos decía que España era irreformable, de derechas, prácticamente fascista. Pero sabíamos que no era verdad" ha asegurado este sábado la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.
Iglesias celebra su victoria buscando la III República
"Sacan los PGE más caros de la democracia, por el chantaje de Iglesias, Bildu y ERC, con los que Sánchez prometió no pactar. Es un insulto a 4 millones de parados, 750.000 en ERTE y 1 millón de autónomos en el alero que suban 9000 millones de impuestos y un 100% de gasto en asesores".
Así ha criticado Pablo Casado la aprobación de las últimas Cuentas, asegurando que el PSOE de Sánchez ha convertido al PSOE histórico en un "cascarón vacío".
Frente al enfado de los partidos de la oposición, Pablo Iglesias ha querido celebrar la aprobación de los PGE,asegurando que defiende la alianza con los nacionalistas "prefigura un proyecto de país" con "la idea de un estado centralista, uniforme y neoliberal".
Un proyecto que no ha encontrado su objetivo en los Presupuestos, según ha afirmado el líder podemita, que ha instado a los jóvenes a "avanzar" para conseguir el verdadero objetivo de su formación: "construir una nueva identidad" nacional, que camine "hacia una nueva República, que tenemos que construir" y que "llegará más pronto que tarde".