Durante los últimos días se han celebrado manifestaciones violentas para exigir la liberación del rapero Pablo Hasél, condenado por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona.
En ciudades como Madrid o Barcelona se han concentrado decenas de personas que se han enfrentado a la policía y que han recurrido a la violencia. Todo apunta a que los próximos días se repetirán estas concentraciones.
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No se trata de concentraciones espontáneas sino muy bien organizadas a través de canales de Telegram o redes sociales como Twitter. Su origen está en grupos antisistema y anarquistas.
Así lo ha confirmado el portavoz del sindicato Sap-Cepol de los Mossos d'Esquadra, Toni Castejón, en declaraciones a la Cadena Ser. "Desde hace décadas, en todo tipo de manifestaciones, huelgas generales, etc. llevamos viendo una organización ejemplar con una manera de actuar muy organizada y nada espontánea, y eso pasa porque hay estructuras muy potentes detrás".
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"Son organizaciones antisistema, anarquistas... Aquí en Cataluña hay mucha simpatía con ellos, con organizaciones como Arran (juventudes de la CUP)", ha explicado Toni Castejón.
"Es algo muy profundo con vínculos internacionales. Cuando esto ocurre se nota y esta vez, con las protestas por Pablo Hasél, si bien no ha sido tan bestia, notamos que ha habido una fuerte organización y muy rápida a nivel nacional. Ha sido la chispa que esperaban para hacer esto", ha comentado.
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Similar a lo ocurrido por el 'procés'
El representante del principal sindicato de la policía autonómica catalana lo ha comparado con las protestas tras la sentencia del 'procés'. "Vino, de lunes a viernes, gente muy profesional y muy violenta de País Vasco, Madrid e incluso de Italia".
El nivel y la contundencia a la hora de tirar objetos, la forma de cortar las carreteras y de organizarse les hizo pensar, como ahora, que no era algo espontáneo y que había grupos radicales detrás de todo.