Las Fuerzas Armadas se han convertido, durante la pandemia del coronavirus, en un aliado inesperado de los sanitarios.
Y es que desde el Ministerio de Defensa se llevaron a cabo más de 20.000 intervenciones el todo el territorio nacional: mas de 5.000 en residencias de mayores, 4.800 en apoyo de centros sanitarios, 2.300 en poblaciones, y más de 70 vuelos en los que se importaron cerca de 160 toneladas de material médico para luchar contra el Covid-19.
En total, 187.000 militares estuvieron desplegados durante tres meses (de marzo a junio) por todo el territorio nacional, dando apoyo sanitario, llevando a cabo tareas de desinfección y de traslado de enfermos y fallecidos, entre otras muchas tareas encomendadas a las Fuerzas Armadas españolas.
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Intervenciones que han sido englobadas en la 'Operación Balmis' del Ministerio de Defensa, que ha costado a la cartera de Margarita Robles cerca de 69 millones de euros, "sufragados con el presupuesto ordinario del Ministerio de Defensa".
Un coste que fuentes militares del diario 'El País' aseguran que asciende hasta los 400 millones de euros de "agujero" que este dispositivo extraordinario contra el Covid-19 provocará en el Ministerio de Defensa.
Un esfuerzo económico de la cartera de Margarita Robles que se verá incrementado con la 'Misión Baluarte', en la que las Fuerzas Armadas pondrán a sus rastreadores militares al servicio del Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas. De momento, Castilla y León, Comunidad Valenciana, Murcia y Cantabria ya han pedido ayuda a estos especiales rastreadores Covid, y se espera que Galicia y Madrid también lo soliciten.
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Sánchez 'premia' la Operación Balmis con un recorte del 27%
Este sobreesfuerzo, de gasto y de recursos humanos, realizado por el Ministerio de Defensa en la Operación Balmis no ha recibido, sin embargo, el aplauso del Gobierno de Pedro Sánchez.
Más bien, todo lo contrario: Y es que el Ejecutivo socialista ha reducido en un 27% las inversiones en Defensa, según indican los datos de ejecución presupuestaria de junio, último mes publicado por Hacienda, según publica OkDiario.
Una reducción que no será temporal, según ha dejado ya entrever Margarita Robles a la cúpula de las Fuerzas Armadas, y no sólo a consecuencia de la crisis económica.
Y es que la financiación de las Fuerzas Armadas depende de los Presupuestos Generales del Estado que apruebe el Gobierno de España; presupuestos en los que intervendrá significativamente Unidas Podemos, habiendo Pablo Iglesias planteado ya a Pedro Sánchez un gran 'hachazo' al gasto militar para invertirlo en partidas sociales.
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Una idea del líder podemita que arrastraba ya desde la campaña electoral, en la que llegó a catalogar la partida de Defensa como una partida "prescindible" dentro del gasto estatal.
Un 'hachazo' presupuestario deseado por el socio de Gobierno de Pedro Sánchez que, de hacerse real, podría poner en serios apuros al presidente socialista, ya que esta reducción podría suponer un grave conflicto de España con sus socios de la OTAN; y es que España tiene un nivel de gasto actual del 0,9% del PIB en Defensa, muy por debajo del compromiso que se adquirió en la Cumbre de la OTAN de 2014, del 2%.