Patricia Muñoz, la líder de Vox en Sabadell (Barcelona), ha tenido que sufrir el acoso de los separatistas en su propia casa.
Indepes radicales han pintado el domicilio de Muñoz: lanzando pintura amarilla contra la fachada y escribiendo “¡Puta fascista!”.
La ira y la violencia de los separatistas queda impune y hace que los políticos constitucionalistas estén completamente desamparados y desprotegidos en Cataluña.
Ataques a todos los constitucionalistas
En lo que va de año, la tienda del padre de Albert Rivera, sedes del PP y del PSC y ahora la casa de representante de Vox en Sabadell ya han sufrido los ataques de los independentistas.
Vox ha sufrido lo indecible durante las últimas campañas electorales en Cataluña donde los violentos de la kale borroka independentista causan el terror en las calles.
Cohetes pirotécnicos, pintura, insultos, escraches, amenazas, cualquier forma de violencia es utilizada por los radicales CDR y las juventudes violentas de la CUP (Arran) para intentar atemorizar a los que no piensan como ellos.