Ayer se hizo oficial la ‘bajada de pantalones’ de Pedro Sánchez ante el independentismo. El presidente del Gobierno acusó solamente a los golpistas de “sedición”.
Los políticos que intentaron un Golpe de Estado respiran algo más aliviados. Se confirmó que el líder del Ejecutivo, a través de la Abogacía del Estado, no les acusó de “rebelión” y rebajó la condena.
Rebaja en la condena
Acusar de rebelión y malversación les hubiese supuesto una pena de 15 a 25 años de cárcel. Por el contrario, tal y como lo ha hecho, evitando acusarles de rebelión la pena se ha rebajado de 8 a 15 años. Sin embargo, eso parece ser insuficiente para los partidos golpistas.
El vicepresidente, Josep Costa, en su Twitter aseguró pasar completamente del gesto de ‘caridad’ que tuvo Sánchez con ellos: “Que no nos engañen, esto no es ningún gesto. La pena puede acabar siendo la misma”.
Los independentistas no ven “gesto”
“No es por nada, pero entre acusar de rebelión con malversación (15 a 25 años) o acusar por sedición (10 a 15 años) y malversación (de 8 a 12 años) no hay una diferencia significativa”, aseguró mostrando su descontento tras ver como los encarcelados se pasaron las normas por el forro.