El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha declarado como ilegal la inmersión lingüística obligatoria monolingüe en catalán y ha obligado a esta región de España a impartir, como mínimo, el 25% de las clases educativas en castellano (el idioma oficial del país).
Los separatistas, con el objetivo de distanciarse un poco más de España, querían que el 100% de las clases en los centros educativos catalanes se impartieran en catalán pero la justicia no lo ha permitido. Ahora, los fascistas independentistas han puesto el grito en el cielo.
El informe que destapa el adoctrinamiento catalán en las aulas
El primero en hacerlo ha sido el presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, que ha lanzado una clara amenaza durante la entrega de los Premis Nacionals de Comunicació. "El catalán en la escuela no se toca", ha dicho el político de Esquerra Republicana (ERC).
Aragonès ha insistido en el modelo de inmersión lingüistica asegurando que se trata de una garantía de "cohesión social" e "igualdad de oportunidades". Asimismo, ha calificado la sentencia del Tribunal Superior de Justícia de Cataluña (TSJC) como una "injerencia" y "una falta de respeto a los docentes".
El expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont ha ido un paso más allá y ha atacado directamente a España por un supuesto ataque al catalán. "España lleva siglos intentando liquidar el catalán, la lengua propia de Cataluña", ha explicado.
Puigdemont ha aprovechado la situación para volver a reclamar la independencia de la región. "No ha abandonado nunca esta obsesión. Sólo tenemos una única posibilidad de salvar la lengua: materializar la independencia que proclamamos. Queda claro que el pactismo mágico no sirve de nada".
Sale a la luz la sucia estrategia indepe para fulminar el castellano de los colegios catalanes
Torra pide culminar la independencia
Quim Torra, que también fue presidente de la Generalitat de Cataluña, ha seguido la misma línea que Carles Puigdemont y ha pedido a los separatistas que culminen la independencia a través de las redes sociales. "Todo lo que no sea culminar la creación de la República Catalana y huir de España en un plazo breve será convertirse en cómplices del exterminio del catalán en manos de un estado que odia la diversidad y la riqueza lingüística. Ya podemos ir pactando cuotas escasas…".
Los separatistas pensaban dejar de lado el castellano en las aulas pero se han encontrado, una vez más, con la justicia. Han intentado campar a sus anchas imponiendo sus propias leyes y normas dentro de las aulas catalanas pero no se han salido con la suya. Asimismo, en lugar de respetar la decisión de la justicia, los separatistas han montado una pataleta grupal para intentar formar una polémica a raíz de esto.