El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha tomado una serie de medidas para intentar reducir el número de contagios por coronavirus en varias zonas de Cataluña pero los catalanes no le han hecho ni caso.
Desde el pasado fin de semana se redujeron las reuniones sociales a 10 personas como máximo, se cerraron locales de ocio nocturno y se recomendó a la población no viajar a segundas residencias ni salir salvo que fuese estrictamente necesario. (¡Torra no es de fiar!: La puñalada por la espalda del Govern a los sanitarios catalanes)
Sin embargo, la directora de Protección Civil de la Generalitat, Isabel Ferrer, ha asegurado que nadie hizo caso a las medidas del Govern y que hay imágenes "que asustan".
Ferrer, en declaraciones al canal 3/24, ha hablado de las playas de Barcelona atestadas de gente que el ayuntamiento tuvo que cerrar para que no se disparasen los contagios por coronavirus. (El supremacismo de Quim Torra está costando vidas en Cataluña y esta es la prueba irrefutable)
Además, la directora de Protección Civil en Cataluña ha confesado que 416.000 vehículos abandonaron la Ciudad Condal durante este fin de semana para ir a segundas residencias o de vacaciones.
“La salida masiva de ayer no es una buena noticia, es una situación de riesgo”, ha asegurado Isabel Ferrer, a la que no le ha gustado nada la actitud de los catalanes.
La directora de Protección Civil de la Generalitat ha explicado que en 15 días se verán los efectos "de estas actuaciones". "Si los datos no mejoran en ese plazo, nos llevará a tomar otro tipo de medidas para garantizar que las cadenas de transmisión se paren". (Torra utiliza el Covid-19 como excusa para buscar el choque frontal contra España)
Ferrer no ha querido hablar de medidas concretas pero ha insistido en que lo prioritario es la salud de las personas. "Veremos dentro de 10 días, no hay ninguna medida descartada, todas son posibles porque está en juego la salud personas, y evidentemente cualquier medida que se tenga que tomar se tomar".
Los catalanes no quieren estar confinados
Los catalanes han respondido con contundencia a las medidas impuestas por Quim Torra. Los vecinos de las zonas más afectadas de la comunidad autónoma han dado la espalda al confinamiento.
Este gesto por parte de los catalanes demuestra que el presidente de la Generalitat cada vez tiene menos apoyos y que consideran que su gestión de la crisis del coronavirus es nefasta.