Los Bomberos catalanes no saben lo que quieren. En 2014 llevaban pancartas de: "Mas 'botifler'. Espadaler mentiroso", "Contra la corrupCiU, decapitaCiU" y ahora llevan lazos amarillos, demencial. (¡Los jueces y fiscales de Cataluña creen que hay que aplicar el 155 con urgencia!).
Han interpuesto una querella contra Quim Torra y Pere Aragonés por un presunto delito "contra la seguridad de los trabajadores" y cuelgan esteladas en las instalaciones. Están en huelga de horas extras desde principios de mes, reclaman mejoras, el material que utilizan está caduco pero sin embargo en sus parques no faltan los símbolos independentistas, el proyecto que defiende el Govern al que reclaman mejoras.
En las instalaciones de Figueres (Girona) estrenadas en septiembre, los funcionarios ya han arrancado la bandera española para colgar la estelada en la torre de entrenamiento. En el mismo edificio hay un gran lazo amarillo, el símbolo por la libertad de los presos encarcelados por el procés y una pancarta con la palabra Democracia. (El hostión que se han llevado los embusteros que hablan de justicia 'politizada').
El pasado viernes no abrieron cinco parques de Bomberos del territorio por falta de plantilla. El resto continúan bajo mínimos por falta de personal, ya que los funcionarios se niegan a hacer horas extra. El año pasado los efectivos antiincendios realizaron medio millón de horas fuera de horario, denuncian.
Los Bomberos, junto a los médicos en huelga, casi asaltan el Parlamento catalán el pasado 20 de noviembre en demanda de mejoras laborales. La protesta se repitió una semana después, el 28 de noviembre, cuando los funcionarios rompieron el cordón policial que habían hecho los Mossos d'Esquadra ante la cámara catalana.
La parte social de los Bomberos denuncia que se encuentra en situación de "colapso estructural" debido a la falta de personal y al mal estado de los vehículos cuba antiincendios que utilizan. Ello no ha sido óbice para que algunos de los funcionarios siguieran apoyando las manifestaciones independentistas o incluso participando en algunas de las algaradas, situándose entre los radicales de los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR) y los Mossos, como en las protestas contra el Consejo de Ministros de Barcelona el pasado 21 de diciembre.
Las quejas vienen de lejos. En el año 2014 más de 1.000 bomberos se manifestaron delante de la Generalitat, llevaban pancartas con lemas como "Los bomberos también somos estructuras de Estado", "Mas 'botifler'. Espadaler mentiroso", "Contra la corrupCiU, decapitaCiU" y "No trabajamos más horas si tú estás en paro”.
O tienen memoria selectiva, o al final darán que pensar en que realmente se han contagiado del maldito virus de la independencia. Si no es así no se comprende esta “lealtad” a los indepes que nunca han hecho nada por ellos. (El anuncio económico con el que Cataluña pretende 'liberarse' de España).