Pablo Iglesias y su formación comenzaron su andadura política defendiendo la transparencia y la solvencia de sus cuentas, frente a la 'corrupción' y en 'enchufismo' presente en otros partidos políticos.
Sin embargo, mucho han cambiado las cosas dentro de la formación del vicepresidente segundo del Gobierno, que ha pasado a convertirse en parte de la 'casta' y tener, nada más y nada menos, que 22 asistentes que cuestan al erario público cerca de un millón de euros al año.
Así pues, y tal y como apunta OKDiario, Iglesias cuenta con un Gabinete y una Secretaría, conformados por un director de coordinación, siete asesores, tres consejeros técnicos, un jefe de servicio y nueve secretarios, cinco de ellos en calidad de 'ayudantes'.
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Como si eso no fuese poco para el marqués de Galapagar, de forma externa, el líder podemita cuenta también con José Julio Rodríguez, exjefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), que fue nombrado Jefe de Gabinete en el Consejo de Ministros.
Sin embargo, lo más destacable no es el número de 'asistentes' de Iglesias, sino los salarios que perciben: 21 de ellos perciben unas retribuciones brutas que oscilan entre los 25.000 y los 62.000 euros anuales; el exJEMAD, por su parte, recibiría un salario en torno a los 100.000 euros brutos anuales.
Acusado en el Congreso de los Diputados
Estos salarios, sin embargo, no forman parte de la "transparencia" de la formación morada. Tanto es así que el líder podemita ha sido acusado, en el Congreso de los Diputados, de ocultar los sueldos de su organigrama, tras evitar responder a las preguntas del resto de los diputados.
Ante su negativa, el diputado popular Mario Garcés dirigió la cuestión por escrito, exigiendo que se hiciesen públicos los sueldos del personal eventual del vicepresidente, entre los que se encuentra Lilith Verstrynge, hija de Jorge Verstrynge.
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"El Real Decreto 139/2020 de 28 de enero, por el que se establece la estructura orgánica básica de los departamentos ministeriales, establece en su artículo 23, la dotación de personal del Gabinete del Ministro y de las secretarías de Estado. Las retribuciones de los mismos son las consignadas en la ley" fue la vaga contestación que recibieron en el PP.
Una contestación muy semejante a la que también han realizado en el Ministerio de Igualdad de Irene Montero, que tampoco ha explicado los pormenores de su equipo, y de sus salarios de "casta".