Zinedine Zidane ya hace completado su lista negra de decartes de cara a la próxima temporada. Son los jugadores que tienen que dejar hueco a los refuerzos de nivel que llegarán el próximo verano.
El técnico galo siempre ha dicho que iba a ir a muerte con sus hombres, pero el tiempo pasa, el reloj biológico avanza y se hace imprescindible renovar una plantilla en la que buena parte de los jugadores llevan muchos años... para fortuna del Real Madrid.
En la lista confeccionada por Zidane, con la que ya trabaja la secretaría técnica, el primero es Gareth Bale. Zidane no quiere que vuelva a entrenarse con él y pide al club que le busque una salida a su año de contrato que le resta.
Ni Bale, ni Marcelo, ni Isco
Pero Bale no se irá solo. Le acompañará una vaca sagrada que lo ha sido todo en el Real Madrid y con el que ya no cuenta Zidane: Marcelo.
Tampoco seguirá Isco. Zidane le valora en su justa medida, pero no quiere que un jugador de su categoría pueda pasar tantos minutos en el banquillo como está sucediendo esta temporada.
Igualmente, Mariano Díaz no seguirá. El equipo se reforzará con uno o dos delanteros de primerísimo nivel (Mbappé o Haaland, o los dos), y Mariano no tiene cabida junto a ellos.
Lo de Álvaro Odriozola está caantado. Zidane no cuenta con él ni cuando se lesiona el primer suplente del titular, como sucedió en Liverpool, donde prefirió a Valverde en el lateral derecho.
Y luego están los cedidos. Salvo Odegaard, ninguno volverá. Ni Luka Jovic, ni Borja Mayoral, ni Jesús Vallejo.