Los 10 disparates de Carles Puigcagón en su libro... ¡Está chiflado!

El expresidente de la Generalitat recoge en su publicación que "teme ser asesinado por el CNI con una bomba", juntamente con otras 9 'barbaridades' más

24 de Noviembre de 2018
Los 10 disparates de Carles Puigcagón en su libro... ¡Está chiflado!
Los 10 disparates de Carles Puigcagón en su libro... ¡Está chiflado!

Carles Puigdemont publicó hace unas semanas su libro, titulado Una oportunidad para Europa, en el que el expresidente de la Generalitat muestra un largo y reiterativo alegato de autodefensa.

El ejemplar, que ha salido simultáneamente en catalán, francés y flamenco, no ha suscitado el interés de ninguna editorial española para traducirlo. El formato de la publicación es el de una conversación con el periodista belga Olivier Mouton, aunque en la práctica éste se ha limitado a hacer una transcripción de las palabras del fugado catalán.

A continuación, mostramos a todos los lectores de 'donDiario' las diez barbaridades que Puigdemont escenifica en su libro.

1. Se declara poseído por una "pulsión anarquista"

"De niño, no podía llamarme Carles". Puigdemont sitúa en el origen de su ideología independentista el hecho de que sus padres se vieron obligados a inscribirle en el Registro Civil con el nombre de "Carlos". Solo pudo cambiarlo tras la muerte de Franco.

2. Un ministro de Rajoy medió para frenar la independencia

Durante los días previos a la declaración unilateral de independencia del 27 de octubre, se multiplicaron los intentos para intentar frenarla.

"Un empresario catalán, unionista pero con buenos contactos en los dos bandos, recibe un mensaje de texto de un ministro español y me lo enseña. Dice que podría interceder ante su 'jefe', es decir, el presidente Mariano Rajoy, si yo estoy dispuesto a hablar", relata Puigdemont, que no cita ningún nombre en alusión al mencionado ministro.

3. Pactó con Marta Rovira para huir a Bélgica, y no con Junqueras

Justo después de la declaración unilateral de independencia, varios 'exconsellers' se marchan a Francia, cerca de la frontera, para debatir qué harían durante las próximas horas.

"Tras analizar la situación, nos decimos que la mejor opción es optar por el exilio, nosotros también. Esa fue nuestra decisión", explica.

El plan de Puigdemont era que todos los políticos se marcharan de España el lunes 30 de octubre, pero él anticipó su salida por miedo a ser detenido.

4. Tiene miedo de que el CNI le asesine en Bélgica con una bomba

El catalán considera que su vida corre peligro en Bélgica y a lo largo del libro confiesa su temor a que los servicios secretos españoles intenten matarle con un coche bomba.

"Vivimos bajo la amenaza permanente de los servicios secretos españoles. Hemos denunciado a la Policía belga que alguien ha puesto localizadores de GPS bajo la carrocería de nuestros coches. Podrían también poner un explosivo", asegura.

5. Alquiló la mansión en Waterloo para ahorrar 

Al líder de la Crida Nacional le molestan las críticas por haber alquilado una casa en Waterloo por el precio mensual de 4.400 euros al mes. El expresidente alega que en Waterloo los alquileres son más bajos que en Bruselas y que esa 'mansión' permite ahorrar mucho dinero en restaurantes, salas y hoteles.

6. Firmó autógrafos en una cárcel de Alemania

Los 12 días que estuvo en una cárcel de Alemania cuando el estado español reactivó la euroorden contra él, no supusieron ninguna "ruptura emocional" ni un choque "insoportable". 

"Tuve la sensación, al entrar en prisión, de volver a la infancia, cuando estaba en el internado, durante la época de Franco", asegura el líder independentista.

7. La prensa española, su enemigo número 1

En varios capítulos del libro, 'Puigcagón' arremete duramente contra la prensa española, a la que considera uno de sus mayores enemigos.

"Los medios españoles nos desprecian sin límites y expresan odio hacia nosotros. (...) Es el fruto de una estrategia encaminada a reducirnos a una escala infrahumana. Nos consideran locos, radicales, líderes manipulados, que no saben distinguir entre el bien y el mal", acusa.

8. ¿Criptomoneda para Cataluña?

El exiliado catalán dedica un pasaje entero de su libro a detallar las ventajas que tendría crear un nuevo Estado para Cataluña, que según su teoría sería moderno y eficaz, y podría introducir también "una revolución en el sistema financiero".

En dicho capítulo explica que "los independentistas catalanes (no aclara si la propia Generalitat) se han puesto en contacto con equipos de especialistas en tecnologías digitales y en el sector bancario para diseñar una moneda virtual, pero no especulativa", detalla. Esta nueva moneda catalana "sería partidaria con el euro".

9. Quiere la mediación del presidente del Consejo Europeo

El expresidente de la Generalitat se declara "decepcionado por el silencio" de los dirigentes de la UE ante las supuestas vulneraciones de los derechos humanos en Cataluña, y a su vez, reclama una mediación europea para que el Gobierno español acepte un referéndum pactado por la independencia del territorio catalán.

Fuentes del gabinete del presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, afirman que el líder rechaza cualquier tipo de mediación.

"El presidente Tusk continuará con su posición de pedir diálogo, que se evite el uso de la fuerza y se respete el Estado de derecho. La solución debe encontrarse dentro de España y respetando plenamente la Constitución española. Tusk no ha tenido ningún contacto con Puigdemont y no era consciente de esta sugerencia", explican.

10. Seguirá en Bélgica para escapar de la cárcel en España

"Si la amenaza de prisión de larga duración persiste en España, la única posibilidad que me queda es el exilio, idealmente en Bruselas. Pero no voy a deprimirme o vivir una crisis de melancolía, no es mi carácter", sostiene el político catalán, que tiene como escenario central "vivir mucho tiempo en el exilio".

Sin embargo, en otro pasaje del libro, Puigdemont afirma que si tiene que vivir en la cárcel en España, está preparado.

"Pero mi encarcelamiento complicaría todavía más la posibilidad de una solución política", verbaliza.