Lo que hay detrás del ataque a Mercadona: Podemos allana el terreno y se avecina algo muy gordo

El Gobierno podría estar preparando un 'impuestazo' a los supermercados como ya hizo con la banca y las energéticas

30 de Enero de 2023
Lo que hay detrás del ataque a Mercadona: Podemos allana el terreno y se avecina algo muy gordo
Lo que hay detrás del ataque a Mercadona: Podemos allana el terreno y se avecina algo muy gordo

Una de las grandes polémicas que se han generado en los últimos días han corrido a cargo de Ione Belarra. La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 del Gobierno no dudó en cargar contra las grandes empresas de distribución en un acto de partido. La secretaria general de Podemos fue un poco más allá y acusó directamente a Juan Roig, presidente de Mercadona, de ser un 'capitalista despiadado'.

Ante tal acusación, no tardaron tanto los partidos de la oposición como los grandes empresarios españoles en poner el grito en el cielo. Parecía incomprensible que una miembro del Gobierno de España acusara directamente a una gran empresa española que genera tanta riqueza y tantos puestos de trabajo otorga.

Pero ¿por qué el Gobierno, en boca de una ministra de Podemos, es capaz de realizar semejantes acusaciones? Las grandes distribuidoras temen que, tras los ataques a Mercadona, el Gobierno esconda un ‘impuestazo’ a los supermercados como el de la banca y las energéticas.

Fuentes próximas a la gran distribución han destacado de forma positiva que otros miembros del Gobierno como el ministro de Agricultura, Luis Planas, hayan salido en defensa de estas empresas, algo que ha dado cierta tranquilidad al sector.

Sin embargo, altos directivos del sector de distribución admiten que una vez el Gobierno ha propiciado esos ataques directos a Mercadona, se esté preparando un 'impuestazo' a los supermercados, sobretodo en un ambiente prelectoral como el que se está viviendo. Se habla de un impuesto similar al que ya se aplica a la banca y las energéticas.

La estrategia para imponer el gran impuesto a las compañías energéticas y a la banca fue la misma: arremeter directamente contra los presidentes del Banco Santander y de Iberdrola, al igual que contra el PP y Vox por su rechazo a los impuestos a la banca y a las energéticas que había planteado un día antes el Gobierno en una proposición de ley en el Congreso.

Es por esto por lo que ahora nace la sospecha que esos ataques de Belarra hacia Juan Roig no hayan sido en vano, no haya sido simple propaganda populista, sino que detrás se esconda un nuevo ataque a las grandes empresas españolas.