Irene Montero se ha marcado un 'Bescansa' en el debate entre portavoces parlamentarios de Televisión Española.
En 2015, la podemita Carolina Bescansa no dudó en acaparar los focos del Congreso de los Diputados llevando a su bebé recién nacido a la Cámara, en lo que muchos entendieron que fue una estrategia política de mal gusto, mientras los podemitas defendían que se trataba de 'conciliación familiar'.
En el reciente debate entre portavoces parlamentarios, Irene Montero no ha dudado en hacer lo mismo que su compañera de partido, acudiendo al encuentro con los otros partidos acompañada de su bebé de tres meses, Aitana.
Madre e hija posaron juntas en el photocall de RTVE, tal vez en un intento de acaparar la atención mediática que ahora persigue el deseado embarazo de Inés Arrimadas. (Inés Arrimadas 'atiza' de lo lindo a la marquesa de Galapagar, Irene Montero, por su hipocresía comunista)
Su hija, una estrategia propagandística
Pese a que muchos puedan entender que esta imagen es un intento de Montero de demostrar que es una madre entregada, además de una trabajadora ejemplar, la verdad es que hay muchos a los que ya esto les suena a 'cuento chino'.
Sobre todo, tras darse a conocer que los 'marqueses de Galapagar' cuentan con una niñera 24 horas para cuidar a sus pequeños, por lo que la presencia de Aitana en la televisión era totalmente innecesaria.
Esta vez, la imagen de austeridad y sencillez que la familia Iglesias-Montero ha querido trasmitir a sus votantes ha quedado en entredicho.