El cobarde que no se atreve a cruzar la frontera francesa para estar más cerca del Parlamento Europeo no para de llevarse palos de todas las instituciones, sean europeas o no.
El Tribunal General de la Unión Europea, la Comisión Europea y el Tribunal Constitucional auguran el final político del Carles Fugademont. Lo único que le mantiene con vida es el espacio mediático que controla en los medios independentistas. Su muerte política, como la de Torra, está al caer. (Torra ya es un cadáver político)
No salieron de Alemania atemorizaros por las autoridades francesas
“Que no se hayan admitido las medidas cautelares que solicitamos es un revés, la cuestión es saber dimensionarlo para evitar euforias o depresiones, dependiendo desde dónde se mire”, comentaba el abogado del golpista, Gonzalo Boye, intentando reducir el impacto.
La manifestación en Estrasburgo para que dejaran acceder a Puigdemont y Comín al Parlamento Europeo fue un fracaso absoluto, pero los cobardes que no se atrevieron ni a cruzar la frontera, lo catalogaron de éxito porque siguen en libertad y no en prisión.
Acobardados al otro lado del Rin mirando por la ventana al Parlamento Europeo
La última baza del fugado reside en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, un organismo que únicamente cuestiona las formas y no dictamina sentencias. Un tribunal que ya les anunció malas noticias.
El TGUE desestimó la petición del ex presidente y ex conceller para que se adoptasen medidas cautelares. De esta manera los dos fugados podrían haber tomar posesión de su escaño como eurodiputados sin tener que volver a España a jurar la Constitución.
Dejó plantados a los simpatizantes indepes que acudieron a la manifestación
El siguiente revés vendría de la Comisión Europea, donde Puigdemont y la ANA impulsaron una investigación y una sanción a España por vulnerar los derechos fundamentales. Portazo en los morros. La decisión acabará en el Tribunal de Justicia de la Unión Europa, donde el resultado será el mismo.
La UE no ha sido la única en humillar al cobarde de Waterloo. El Tribunal Constitucional dio a conocer la sentencia por la aplicación del 155. Por unanimidad, los magistrados resolvieron que Puigdemont desatendió en dos ocasiones los requerimientos del gobierno para aclarar si había declarado la independencia en octubre de 2017.
Uno de los frentes abiertos puede meterle la mano al bolsillo
Por otro lado, el Tribunal de Cuentas sigue investigando si los líderes del procés fueron los responsables contables del 1-O y si deben de abonar a las arcas del estado unos cuantos millones de euros de su bolsillo.