La izquierda esta desunida. Más que nunca. Por eso hablar de "Iquierda Unida", mientras Llamazares y Garzón se echan los trastos a la cabeza, suena a chiste.
Campaña de "linchamiento"
El histórico líder de Izquierda Unida acaba de dimitir de todos sus cargos en la organización a raíz de la difusión de una grabación en la que se muestra dispuesto a encabezar la lista electoral de la plataforma Actúa del juez Baltasar Garzón. Llamazares se ha ido porque entiende que en IU existe una campaña de linchamiento contra él organizada por la propia dirección de IU. «Y lo siguiente que quieren hacer es suspenderme de militancia... Quieren enterrarme políticamente», un comentario que revela El Mundo que ha transmitido a los suyos en Madrid.
En una entrevista concedida al diario El Mundo Llamazares no oculta su actual estado de "tristeza y expectación. La reacción de Izquierda Unida ha sido muy dura conmigo".
Le han pasado factura porque dijo: «Si tengo que desvestir un santo para vestir a otro estoy dispuesto», refiriéndose a desvestir a IU para vestir a Actúa. Llamazares descubre que Garzón le ha dado "confianza y credibilidad. Los que estamos en Actúa somos personas con esas dos características, y yo tengo plena confianza en Baltasar. Él se ha podido equivocar, todos los hacemos, pero ha sido honrado. Y eso en la política de hoy en día, es un valor escaso. Por eso he aceptado estar a su lado".
Y preguntado sobre lo que es Actúa, Llamazares ha respondido: "Actúa lo que pretende es dar voz a esa izquierda que se queda en casa, que no vota porque está desencantada, por no decir, asqueada, de aquellos en los que confió elección tras elección... Por mi parte seguiré movilizando a los votantes frustrados con IU, porque pienso que hay un lugar en la izquierda coherente y dialogante, respetuosa con el legado de la Transición y con voluntad de mejorar la vida".
Sus diferencias con Alberto Garzón
Sobre su divorcio con Alberto Garzón ha explicado: " Lo que más me ha separado de Alberto es su opción definitiva de aliarse con Podemos. Porque yo no creo, como Pablo Iglesias, que estemos en un estado posfranquista. Lo de Alberto es un error gravísimo. Un complejo de inferioridad que se ha llevado por delante ideas, programas... y la pérdida de miles de votos. Ese es uno de los motivos por los que han decidido desahuciarme. Me quieren echar, pero voy a dar la batalla..."
Y añade: "y además no quieren que me presente a las primarias en Asturias, en enero. La dirección estatal no puede tolerar que haya vida más allá de Podemos. Izquierda Unida, tal cual está hoy, tiene más pasado que presente. Sigo comprometido con IU de Asturias y con los militantes y amigos de toda IU a los que llamo a rebelarse contra el desahucio de la izquierda».