Parece que, una vez más, la historia se repite. El FC Barcelona – Villarreal disputado ayer en el Camp Nou fue un partido de alta tensión en el que el conjunto culé se volvió a ver claramente favorecido por el árbitro.
Las agresiones de Piqué y Busquets, que no recibieron el castigo pertinente, y el gol en fuera de juego de Dembelé, demuestran que hubo un nuevo atraco culé en Liga.
Con VAR o sin VAR, el Barça sigue contando con la ayuda inestimable de los árbitros en LaLiga, y el tema se repite año tras año.
Gerard Piqué, acostumbrado a quejarse de los arbitrajes, le soltó la mano en la cara a Gerard Moreno. Tarjeta roja de libro.
Aunque la agresión fue clara y no deja lugar a dudas, Munuera Montero, el colegiado del encuentro, no la sancionó y no consultó la acción con el VAR.
En los instantes finales del encuentro, Sergio Busquets también agredió a Pablo Fornals, pero el árbitro decidió no amonestar al centrocampista del Barça.
El conjunto culé también salió claramente beneficiado en el gol de cabeza de Piqué. Y es que el fuera de juego previo de Dembelé es clamoroso.
El fuera de juego del francés es tan descarado que las redes sociales han ardido en críticas contra los árbitros y el trato de favor que recibe el Barça desde hace demasiados años en la Liga Santander.
Fornals: “Me pega un guantazo”
El centrocampista del Villarreal fue muy claro sobre la agresión que sufrió por parte de Busquets.
Ambos jugadores pugnaban una pelota dividida en el suelo, cuando el ‘5’ del FC Barcelona le soltó un fuerte manotazo.
Acto seguido, Fornals recriminó la acción al colegiado diciéndole lo que todo el mundo había visto: "me pega un guantazo".
Todos conocemos el currículum de Busquets, un jugador al que le gusta tirarse y hacer teatro y al que los árbitros parecen haberle dado carta blanca para pegar a todo jugador rival que se mueve.
El clamoroso fuera de juego de Dembelé
Y esto señores de VAR no es fuera de juego de Dembélé???? pic.twitter.com/hzacSLrtYC
— Javier Rodriguez (@javirm_0312) 2 de diciembre de 2018