Durante su etapa de ministro y de presidente de la Generalitat Jose Montilla se llevó muchos disgustos y tuvo que afrontar serios problemas que le ocasionaron importantes quebraderos de cabeza. Ahora llega el momento de pasar cuentas y cobrárselo a lo grande. Para esto están las puertas giratorias.
Como premio a los servicios prestados, Montilla entra como consejero en Engagás. Mucho dinero y poco trabajo. El chollo que desea cualquier hijo de vecino. Nada que objetar, aunque no resulta ni ético ni estético que un político con altas responsabilidades ponga a disposición de la empresa privada los conocimientos y relaciones adquiridos durante su etapa política.
El despacho de los 400.000 euros
Lo que ya no es admisible es que los catalanes y españoles deban pagarle a Montillo 400.000 euros anuales para que mantega su despacho privado y el personal que lo habita. (El expresidente Montilla tumba el Procés: "No ha aportado nada positivo")
Montilla se ha incorporado a la Empresa Nacional del Gas. Es un premio de Pedro Sánchez por haber renunciado a su escaño en el Senado cuando el presidente del Gobierno necesitaba ese escaño para Miquel Iceta. Montilla cobrará en Enagás 160.000 euros anuales más complementos que le sitúan por encima de los 200.000. No está mal.
Y como gesto de generosidad, Montilla ha anunciado que renunciará al sueldo vitalicio de 90.000 euros que le corresponde como expresidente de la Generalitat. ¡Faltaría más! Cambia 90.000 por 200.000.
A lo que no renuncia Montilla es a que los españoles sigamos pagándole el despacho, el coche oficial y la escolta por su cara bonita.
Eso quiere decir que conservará su despacho y el personal que lo ocupa, lo que supone un coste de 400.000 euros que paga la Generalitat y que forma parte del paquete que reclama Torra para poder hacer frente a sus necesidades y gastos absurdos.
105.000 euros de alquiler
Situado en la zona noble de Barcelona, en la avenida Diagonal, el alquiler del despacho cuesta 105.000 euros, a los que hay que sumar 209.000 más para pagar los salarios de los tres trabajadores que tiene ahí enchufados Montilla. A eso se añaden 48.000 euros de gastos corrientes y de seguridad y 36.000 de limpieza y mantenimiento.
Y para justificar ese gasto, Montilla ha asegurado que allí no trabajará para Enagás, sino como expresidente de la Generalitat. ¿Y cuál es el trabajo de un expresidente de la Generalitat que le cuesta a los ciudadanos 400.000 euros anuales? Un misterio. ¡Y un escándalo!