El futbolista brasileño Carlos Henrique Casemiro fue objeto de un clarísimo penalti ante Osasuna el pasado sábado que ni el árbitro ni el VAR quisieron señalar. Su indignación tras el final de los noventa minutos era enorme y despotricó de lo lindo en el vestuario contra la labor del colegiado, según ha podido saber DonDiario.
Fuentes internas nos desvelan el terrible enfado que llevaba Casemiro al entrar al vestuario después de que Oier Sanjurjo le hiciera un penalti como una catedral en los últimos minutos del encuentro de El Sadar.
Disgusto en el Real Madrid: Zinedine Zidane ha caído en la trampa del vestuario
El brasileño protestó la pena máxima e incluso se encaró con Oier, y las imágenes reflejan que tenía razón al quejarse: hubo penalti, pero ni el árbitro ni el VAR movieron un dedo para impartir justicia.
Tras el pitido final, Casemiro entró al vestuario echando pestes: "Me han hecho penalti, nos han robado otros dos puntos", lanzó el brasileño, indignadísimo. Sus compañeros le preguntaron qué había pasado: "Me ha agarrado y me ha tirado al suelo cuando iba a rematar", comentó con el resto de futbolistas.
Enfado en el Real Madrid
De este modo, a la indignación por el toreo al que fueron sometidos por LaLiga y al enfado por el hecho de que el encuentro no fuera suspendido, el Real Madrid suma también el cabreo con el arbitraje.
Edu Aguirre aportaba este domingo más información al respecto en El Chiringuito. Según el periodista, en el vestuario blanco creen que les han tomado el pelo: "Deberíamos habernos plantado, la Liga se ha reído de nosotros".
Sergio Ramos puede salir del Real Madrid en este mismo mercado de invierno
Por desgracia, el Real Madrid ya está acostumbrado a este tipo de arbitrajes. El VAR no ha cambiado nada. Cada vez que los árbitros pueden birlarle algún punto lo hacen sin ningún pudor. Es la historia de nunca acabar. Unos tienen la fama y otros cardan la lana, como suele decirse. Siempre acusan al Madrid de ser beneficiado, pero el saldo arbitral siempre sale en negativo para los blancos.
Casemiro lleva desde el sábado muy enfadado. Sabía que le habían hecho penalti, y ver las imágenes en televisión que lo demuestran le ha cabreado aún más: "¿Por qué el VAR no dijo nada?", se preguntan todos en el club blanco.