La vacuna del coronavirus ya ha llegado a España y las primeras personas ya han recibido la dosis. Eso sí, un importante porcentaje de la población sigue teniendo serias dudas sobre ella.
Desde que se anunció que la vacuna se empezaría a comercializar a finales del 2020, muchos españoles aseguraron que no se pensaban poner la dosis ya que no les generaba confianza.
Este sector piensa que puede ser peor el remedio que la enfermedad y que no es una vacuna fiable. Por ello, han pregonado que no piensan acudir al centro de salud si les citan en los próximos meses.
Hay varias razones que llevan a los españoles a rechazar la vacuna del coronavirus. A continuación te exponemos las tres principales que llevan a la sociedad a esta desconfianza.
Rapidez de la vacuna
Las vacunas tardan varios años en comercializarse desde que comienza la investigación pero en el caso del coronavirus se ha acelerado el proceso y solo han pasado algunos meses.
Parte de la sociedad piensa que es arriesgado ponerse una vacuna a la que no han dedicado el tiempo necesario y, por lo tanto, rechazan ser de los primeros en pasar por el centro sanitario.
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Desconfianza en el Gobierno
La población española no confía en los políticos y en sus intenciones con la vacuna. Tras una gestión de la crisis del coronavirus muy criticada, no piensan que vayan a sumar un acierto con la vacuna.
A pesar de que la vacuna está hecha en laboratorios de varios países, los españoles desconfían porque el Gobierno de España ha mostrado su apoyo. Piensan que hay intereses políticos en este asunto.
Efectos secundarios
Hay muchas dudas sobre la vacuna y sus efectos secundarios. Si afectan a los alérgicos, si hay personas que no se la deben poner, si da reacción dependiendo de si la dosis es de una farmacéutica o de otra...
Todas esas incógnitas generan rechazo en la población, que prefiere esperar unos meses para tomar una decisión definitiva sobre si ponerse la vacuna o seguir como hasta ahora.