La sierra del estado brasileño de Pernambuco se ha convertido en el centro de la polémica en Brasil, después de que la artista Juliana Notari decidiera utilizar este peculiar espacio para mostrar su arte... y su rechazo ante el "abuso secular" sufrido por las mujeres en el país.
Y es que la artista ha creado una gigantesca reproducción de la vulva de una mujer en resina: 33 metros de largo y 11 de ancho, que ha sido producida después de realizar una excavación de seis metros de profundidad en la tierra de la montaña del ecosistema Mata Sul, en el nordeste del país.
Dentro del parque-museo Usina das Artes, la escultura está expuesta a cielo abierto, conviviendo con la fauna y la flora del lugar, así como con exposiciones permanentes de artistas como Joan Barrantes o Carlos Garaicoa.
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Sin embargo, la polémica se ha centrado en la 'explicación' de la escultura por parte de Notari, que ha asegurado ser un grito femenino contra el "abuso secular" sufrido en el país por culpa del actual Gobierno.
Bolsonaro, el centro de la crítica artística
"La obra abre heridas y levanta una vez en este período que vivimos desde hace dos años, en el que han retrocedido algunos valores de la cultura y la educación, que son los más atacados por la extrema derecha en Brasil" ha asegurado Notari en una entrevista a EFE, señalando directamente al Gobierno de Jair Bolsonaro.
La escultura, de nombre 'Diva', ha levantado fuertes críticas entre los sectores más conservadores de la sociedad, asegurando la artista que ha llegado a sufrir ataques de los "seguidores de Bolsonaro y evangélicos con cierto fascismo".
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"Este trabajo encara de frente a esas personas con prejuicios y valores retrógrados" ha asegurado la artista, que además ha querido remarcar la importancia de la lucha feminista contra este tipo de "opresión".
"Estamos cargados de esa energía de la opresión, especialmente en los asuntos de feminidad, con una mujer reprimida a lo largo de siglos por hombres blancos que tienen el dominio de su cuerpo [...] con patrones patriarcales [...] que fueron insertados en nuestra civilización y en la mujer".