La violencia 'feminista' también existe: ¡El tremendo calvario de Alex Skeel!

El joven de 22 años sufrió agresiones y torturas de toda clase por parte de Jordan Worth, con quien convivía, hasta que un policía lo salvó de la horripilante situación

29 de Diciembre de 2018
La violencia 'feminista' también existe: ¡El tremendo calvario de Alex Skeel!
La violencia 'feminista' también existe: ¡El tremendo calvario de Alex Skeel!

Torturado. Humillado. Golpeado. Secuestrado. Así estuvo durante tres años Alex Skeel, a manos de su pareja Jordan Worth.

Worth, una chica brillante y perversa, fue quien ejecutó todo tipo de ataques hacia Skeel, de 22 años, cuando convivían en Stewartby, Reino Unido. (Los 27 países de la UE aprueban el "único acuerdo posible" con Reino Unido)

Fueron unos meses muy duros para el joven, ya que su secuestradora no le permitía ni siquiera ver a su familia. Prácticamente era como si fuera su esclavo.

Al final, la policía inglesa pudo acabar con el calvario de la víctima y detuvo a la agresora.

Una historia que viene de hace tiempo

Ambos protagonistas de esta historia se conocieron cuando tenían 16 años. Estaban enamorados, crecieron juntos, se amaron y, pasado un tiempo, decidieron empezar a vivir juntos.

Jordan se graduó en Bellas Artes en la Universidad de Hertfordshire y quería dedicarse a la enseñanza. Pero nadie de su entorno tenía ni la más mínima idea del monstruo que la joven llevaba dentro.

Empezó a controlar deliberadamente a la víctima, chequeándole el teléfono y diciéndole cómo tenía que vestirse. Hasta que un día le golpeó la cara con un martillo y lo aisló completamente de su familia. (Las brutales agresiones de los independentistas a Cake Minuesa)

Por suerte para él, un día un agente tocó la puerta de su domicilio tras la llamada de un vecino que aseguraba haber oído golpes. Intentó esconderse las quemaduras que se le veían y dijo a la policía que se las había hecho él mismo. Los agentes no se lo creyeron.

"Me salvaron la vida. Me sentó en su patrulla y me dijo que sabía lo que estaba ocurriendo", relató el joven. "Estas heridas no fueron cometidas por ti. Dime la verdad", le exigió el oficial que lo atendió.

Finalmente, la agresora fue sentenciada a siete años de prisión. (Preocupante Borrell: "Me preocupa más la unidad del Reino Unido que la de España")