¡¡La vergüenza de La Meridiana!!

Los violentos campan a sus anchas y ya llevan 128 noches consecutivas cortando La Meridiana y fomentando un clima de confrontación y violencia.

19 de Febrero de 2020
 ¡¡La vergüenza de La Meridiana!!
¡¡La vergüenza de La Meridiana!!

¡¡Barcelona ha dicho basta!! 128 noches seguidas, 128 noches de tensión, 128 noches de vergüenza. El separatismo catalán, en connivencia con los poderes públicos locales, ha decidido desafiar y castigar a la Cataluña mayoritaria, esa Cataluña silenciosa que se siente española y no comparte los dogmas de fe separatistas, cortando cada noche una de las arterias principales de la ciudad condal: La Meridiana, una vía por la que circulan 57.000 vehículos diariamente. Y no pasa nada. El hecho se ha convertido ya en parte de paisaje de la ciudad, en una atracción turística novedosa, ante el desinterés de la clase política.

La excusa para sembrar el caos

La excusa son los 'presos políticos', el derecho a la autodeterminación, la amnistía. la inhabilitación de Torra y todas esas gaitas que sirven para camuflar el ansia de violencia que se respira en el sector agresivo de la Cataluña fracturada. Y de aquellas hogueras, aquellas barricadas, aquellos enfrentamientos y aquellos destrozos que asolaron Barcelona como respuesta a la sentencia del Tribunal Supremo contra los presos golpistas, queda como símbolo y recuerdo el corte diario de La Meridiana. (Agresión indepe: ¡¡Los CDR golpean a un motorista harto de los cortes en la Meridiana!!)

Y la ciudadanía se ha cansado. Los vecinos de la zona, las comunidades de propietarios, asociaciones de vecinos, la Asociación de Comerciantes Fabra Centro y Barcelona Comercio, han dicho basta ante la inoperancia de los políticos para garantizar la convivencia en una ciudad que parece vivir al margen de la ley mientras los ciudadanos se enfrentan día tras día a los piquetes de los violentos reclamando una libertad de movimiento que en Barcelona, en esa hora y en esa zona, no existe. 

La denuncia de un periodista

Y cada día la misma historia: broncas entre los afectados, que sufren las consecuencias del capricho de los supremacistas, y los violentos que encuentran un entretenimiento y un sentido a sus vidas perjudicando a los demás. 

Ante la falta de respuesta política, ha tenido que ser un periodista, Xavi Rius, director de e-noticies.com, quien haya liderado la lucha contra el caos, el desorden y el descontrol en una ciudad que forma parte de un estado de derecho y en defensa de los derechos de todos los ciudadanos. (El director de e-notícies, Xavier Rius, agredido en el corte indepe de la Meridiana)

Rius, en calidad de periodista y ciudadano, se encargó primero de denunciar lo que está pasando en La Meridiana cada noche desde hace más de cuatro meses filmando la situación consentida por la policía y las autoridades. Allí tuvo constancia del clima de violencia que se vive recibiendo amenazas e insultos por no comulgar con las ruedas de molino de los totalitarios que no aceptan someterse a la ley.

Y luego ha presentado una denuncia por prevaricación -entre otros delitos- ante la fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña contra el presidente de la Generalitat, Quim Torra; la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; la portavoz del Govern, Meritxell Budó; el conseller de Interior, Miquel Buch; el teniente de alcalde de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle; el comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, Eduard Sallent; el jefe de la Guardia Urbana, Pedro Velázquez; y el director general de Administración de Seguridad del Departament de Interior, Jordi Jardí, que sería quien ha autorizado las protestas. (Es de ERC, ha cuestionado los cortes de La Meridiana y le han linchado en las redes)

"Si ustedes no hacen nada con La Meridiana, lo haré yo"

"Si ustedes no hacen nada con la Meridiana, lo haré yo", le dijo Xavier Rius a Meritxell Budó, la portavoz del Govern, en el trasncurso de una rueda de prensa. "Parece mentira que lo tenga que hacer un ciudadano normal y corriente, pero yo creo que los vecinos de la Meridiana, los conductores, los tenderos tienen derecho a pasar libremente por la Meridiana sin ser bloqueados, insultados, espentejats, agredidos, etc", añadió. Y concluyó: "Ustedes han hecho algo peor que no hacer nada. Ustedes han politizado los Mossos. Yo estuve allí y los Mossos estaban a doscientos metros de una gente con tono agresivo y sin que intervinieran. Me dijeron que recibían órdenes políticas".

La reacción del periodista ha servido para que el ayuntamiento despierte de su letargo y, por fin, reclame al Govern de la Generalitat que haga algo para acabar con los desórdenes en la ciudad después de 128 noches de crispación. La Vanguardia descubre hoy que la Guardia Urbana ha enviado un informe al Derpartament de Interior de la Generalitat para que prohiba la concentración de un centenar de personas que cada noche se reune para cortar La Meridiana, especialmente tras uno últimos días en que ha crecido el nivel de violencia "poniendo el peligro a las personas y los bienes". (¡¡Varios miembros de JxCat se unen a la horda indepe que volvió a cortar la Meridiana y desafían a los Mossos!!)

El derecho de manifestación

Y la respuesta de la Generalitat a los avisos de la Guardia Urbana siempre ha sido la misma: “El de manifestación es un derecho fundamental especialmente protegido, incluso por la Constitución, que sólo se puede restringir en casos excepcionales, que los mossos consideran que no se dan”. Los Mossos podrán considerar lo que quieran, pero lo cierto es que desde el 25 de enero en esas concentraciones aparecen “encapuchados con actitud violenta tanto hacia los agentes de la policía barcelonesa que regulan el tráfico como con los ciudadanos que les recriminan su actitud”. La ola violenta va a más y la libertad de expresión choca con la libertad de los otros ciudadanos para desplazarse por su ciudad sin miedo a acciones vandálicas de los violentos.

El informe de la Guardia Urbana habla de puñetazos y patadas: "El día 4 de febrero un grupo de encapuchados increpó a los conductores bloqueados hasta el punto de que a una motocicleta le quitaron las llaves de contacto y le rompieron el retrovisor”, al margen de que “diariamente los concentrados levantan hogueras que producen daños importantes en la calzada”.

Es hora de acabar con el descontrol de las calles de Bsarcelona. Es hora de que los ciudadanos disfruten de su ciudad sin la amenaza constantes del supremacismo radical y violento que no obedece más ley que la de sus caprichos. Es hora de meter en vereda a quienes buscan el caos a costa de molestar al resto de ciudadanos, que son inmensa mayoría.